Madrid. La Comisión Nacional de Competencia (CNC) ha autorizado la fusión de Antena 3 y La Sexta, aunque ha impuesto a la compañía resultante una serie de condiciones, del mismo modo que hizo en octubre de 2010 con la fusión entre Telecinco y Cuatro. El Consejo de la CNC ha subordinado la operación al cumplimiento de distintas condiciones durante un periodo de cinco años referidas al mercado de la publicidad, la oferta de canales del grupo resultante, la compra de derechos o la obligación por parte de la nueva compañía de suministrar información a Competencia. Con estas condiciones, el organismo regulador entiende que se resuelven los "significativos" problemas de competencia "en distintos mercados audiovisuales", y en especial, en el de publicidad televisiva, que podría tener "la desaparición de La Sexta como operador independiente, el reforzamiento del poder de mercado de Antena 3 y la mayor capacidad e incentivos de Mediaset y Antena 3 para coordinarse tácitamente tras la operación de concentración".
Desde que comenzó la investigación, Antena 3 ha presentado varias propuestas de compromisos para resolver los problemas detectados. La última fue el 14 de junio y se consideró "insuficiente" por el organismos regulador en el ámbito del mercado publicitario, en donde, señala, existe el riesgo de que el nuevo grupo desarrolle políticas que "limiten indebidamente" la libertad de contratación de los anunciantes o echen del mercado a otros canales. Para evitar este tipo de prácticas, Competencia señala que el nuevo grupo no podrá emitir los mismos anuncios al mismo tiempo en todos los canales de Antena 3 y La Sexta, aunque sí podrá seguir ofreciendo esa posibilidad en los canales englobados bajo la sociedad que comercialice la publicidad del canal Antena 3, como hace ahora con Nitro, Neox y Nova, dentro de su estrategia de pauta única. En cualquier caso, el grupo deberá ofrecer la posibilidad de comprar espacios publicitarios de forma individualizada en cada uno de sus canales y no podrá condicionar las ofertas comerciales a la garantía de contratación de una cuota mínima de inversión o de GRP. Tampoco podrá gestionar la publicidad de otros canales de la TDT ni vender conjuntamente los espacios publicitarios de sus dos canales en abierto de mayor audiencia.
Por otro lado, el nuevo grupo no podrá ampliar su oferta en abierto alquilando canales de otros grupos "ni bloquear las mejoras de calidad de los canales con los que comparta múltiple" de TDT. En cuanto al mercado de los derechos televisivos, Competencia también ha impuesto cotos a la posibilidad de acción de Antena 3 y señala que deberá limitar la duración de sus contratos de adquisición exclusiva de contenidos a tres años, sin incluir derechos de adquisición preferente o prórroga. Asimismo, deberá restringir su capacidad para excluir del mercado a las productoras de televisión nacionales. El acuerdo de fusión por absorción entre Antena 3 y La Sexta fue anunciado en diciembre. El grupo resultante dispondrá de espacio como para emitir hasta ocho canales en la TDT y el mercado publicitario quedará repartido fundamentalmente entre Mediaset España (43,5%) y el grupo formado por Antena 3 y La Sexta (42%).