bilbao. Hace un año todo el equipo de Surio se vestía de gala para presentar la nueva programación de las dos cadenas de ETB. La televisión pública acusaba (sobre todo desde septiembre de 2009) un descenso contínuo en los índices de audiencia. La dirección actual responsabilizaba a la parrilla de sus antecesores de la fuga de espectadores a otras cadenas.

La programación que hace un año se impuso, sobre todo en ETB-2, no ha funcionado. Solo Robin Food da alegrías a los gestores actuales de ETB. Sigue en la cumbre de los programas más vistos el reality de aventuras que puso en marcha la anterior dirección: El conquistador del Fin del Mundo. Con un 17,1% dobla la media de la cadena y reúne los domingos a cerca de 160.000 espectadores.

Hacer un repaso al año que ha vivido la televisión diseñada por la dirección de Surio es imprescindible para ver qué han dado de sí los nuevos espacios. El 90% de las novedades para ETB-2 no han funcionado y la huida de espectadores ha lastrado alguno de los programas más populares y vistos de la cadena. Las últimas incorporaciones a la parrilla no consiguen el aprobado en audiencias y sus emisiones pueden convertirse en un lastre. Consumidores, Hora GMT, Escépticos y Capital Cultura ofrecen unos registros que están muy alejados de la media de ETB, aún siendo esta muy baja.

Desde principios del año Consumidores y Hora GMT se emiten los miércoles, y los resultados son muy bajos. El primero se inició en el prime time de los sábados con escaso éxito. En lo que va de 2011 arroja una media del 4,5%. La dirección defiende con uñas y dientes el proyecto que lidera Ricardo Oleaga, ex jefe del área de política y ex subdirector de informativos no diarios. Lo considera un espacio de servicio público y tiene uno de los equipos con mayor número de personas de la cadena, lo que encarece el producto.

Ana Aizpiri, exeditora de los informativos del mediodía, se hizo cargo en diciembre de un programa de información internacional Hora GMT. Comenzó su andadura los jueves pero cambió a los miércoles. Los marcadores de Sofres no le otorgan buenas calificaciones y los espectadores le dan la espalda. Las últimas dos emisiones no son brillantes en share: 2,9% y 0,8%. La suma de la audiencia con Consumidores deja a los miércoles como uno de los días más flojos de la semana.

Capital Cultura sigue la estela de los anteriores. El espacio que dirigen Julio Flor y José Fernández de la Sota no ha entrado con buen pie en ETB-2. Miguel Ángel Idígoras, director de la cadena, se curó en salud en su presentación y señaló que "aunque las audiencias nos importan, sabemos que no va a ser un programa de grandes audiencias, pero se ajusta a lo que es una televisión pública. Últimamente, audiencias mayoritarias y calidad son antagónicas". Esta vez ha acertado en sus predicciones: el programa no llega al 2% de cuota de pantalla.

solo una emisión El cuarto programa, estrenado el día de Año Nuevo, fue Escépticos. Había sido anunciado en una de las reuniones del consejo de administración. Se emitió uno y no se ha vuelto a saber nada más de él. Fuentes del gabinete de prensa de ETB aseguraron a este periódico que se trataba de un número piloto, algo que no se dejó ver en las notas que habitualmente distribuye la cadena cuando comunica un nuevo espacio. Además, fue anunciado en EITB.com de la siguiente forma: "Escépticos, todos los sábados a las 22.00 horas en ETB-2". También se aclaraba que constaba de 13 documentales de 25 minutos cada uno. Abordaba "las trece cuestiones científicas y pseudocientíficas más populares". Este programa está dirigido y presentado por Luis Gámez, redactor de El Correo. La única emisión que se ha ofrecido no tuvo un gran recorrido, un 8,8%. Una nota que superaba a Consumidores pero que sigue siendo muy baja para la noche de los sábados. Sobre todo si se tiene en cuenta que el 1 de enero fue una las jornadas de mayor consumo televisivo.

Por su parte, Euskadi directo no está consiguiendo igualar a Date el bote y ya no tiene la disculpa de coincidir con Arguiñano. La versión de la tarde sí se cruza con el cocinero guipuzcoano y los resultados dejan mucho que desear, alejándose de los tiempos en los que Monk abría paso al segundo informativo del día. Tampoco convence en fin de semana.

El actual equipo divaga a la hora de enfocar la programación. Marca dos caminos divergentes y no obtiene resultados en ninguno. La apuesta por el entretenimiento le ha fallado en sus dos programas estrellas. Uyyyyy! era una de sus bazas principales para la noche de los lunes. Terol, al frente de un programa de humor deportivo, fue vendido como un descubrimiento televisivo. Aunque los resultados no avalaban la continuidad y el coste que suponía la emisión semanal, se mantuvo, fue renovado y finalmente los datos se impusieron: ha sido retirado de la programación.

Resignación El desembarco de Antxon Urrosolo era otro de los ases que guardaban en la manga Idígoras y Julián Pavón, su asesor. Borraron del mapa de ETB a Pásalo. Alegaron desgaste y la necesidad de innovar e impusieron una mala copia del espacio que eliminaban. Firmaron un contrato sin cláusula de audiencia que tenía que haber terminado el 31 de diciembre de 2010. Aspaldiko sigue emitiéndose sin Urrosolo en pantalla ni en la dirección. Los responsables de programas pidieron a diversas productoras un proyecto para ocupar las tardes del segundo canal. Todo está paralizado porque el espacio ha experimentado una subida, ya no está en el 6% de media (ha logrado situarse casi en el 9%) y parece que Surio y su equipo se resignan a este porcentaje, ligeramente superior a la media de la cadena. Por lo que parece las tardes de ETB-2 seguirán siendo de Arantza Sinobas y Maite Esparza.

Durante las últimas semanas muchas fuentes aseguraban que la productora sevillana ZZJ -en ella trabajó Julián Pavón, ahora asesor de Idígoras- se iba a hacer con las tardes de ETB-2. Su propietario, José María Zafra, señaló a DEIA que todo estaba paralizado y que los rumores que le otorgaban a su empresa el nuevo proyecto no estaban justificados: "No me han adjudicado ningún proyecto y mi empresa es tan favorita como las otras que se han presentado. Está todo aplazado sine die. Se quedan con lo que tienen porque parece que algo ha mejorado".