Bilbao
Un sacerdote oficia una misa de campaña antes de la batalla. Los gudaris, recogidos en la oración, atienden al oficio celebrado en el exterior de un caserío del barrio de Astarrika, en Berriatua. Una ikurriña de la compañía Txorierri preside el culto. Es febrero de 1937 y los gudaris están en el frente de Lekeitio. Inmortaliza la escena el polaco David Chim Seymour que, junto con sus compañeros fotógrafos Robert Capa y Gerda Taro, recorre los frentes del bando republicano durante la Guerra Civil española. Las imágenes han vuelto a la actualidad con la inauguración ayer de una exposición en el International Center of Photography de Nueva York, que muestra por primera vez los negativos de esas instantáneas, reencontrados en la llamada maleta mexicana, perdida durante casi siete décadas.
La exposición pone de actualidad la labor pionera de Capa, su novia Taro y de Chim Seymour, judíos huidos de sus respectivos países, los primeros fotoperiodistas de la historia. La mayor parte de las imágenes eran conocidas, pero también la maleta mexicana aporta retratos inéditos de Ernest Hemingway, Federico García Lorca y Dolores Ibarruri La Pasionaria. El periplo de la maleta da cuenta del turbulento siglo XX: Capa tuvo que abandonar la caja donde guardaba las fotografías de la Guerra Civil cuando los nazis se aproximaban a París ,y ésta pasó por varias manos y países hasta que un general mexicano acabó custodiándola, aunque no fue hasta 2008 cuando se conoce públicamente su existencia.
Entre estos 120 rollos de negativos, destaca el trabajo de Seymour, que retrató el frente vasco y, más en concreto, quiso servir de testigo de las expresiones de religiosidad de los gudaris, y del respeto del pueblo y del Gobierno vasco al clero. Inmortalizó a los frailes del convento de Larrea, en Amorebieta, y una misa en Berriatua con los gudaris de la compañía Txorierri, del batallón Mungia. Curiosamente, el museo neoyorquino también data estas últimas instantáneas en Amorebieta, mientras que la agencia Efe las sitúa en Lekeitio, previsiblemente por la cercanía entre las dos localidades.