APOYANDO la cruzada por la salud masculina, tres fotógrafos vizcainos han aunado cámaras y objetivos para retratar a una cuarentena de barbudos que se han afeitado para sumarse a la iniciativa Movember. Dani De Pablos, Gaizka Medina e Iker Zarraga realizaron el domingo en la Barbería del Norte una sesión de fotos que expondrán en el mes de los bigotes comprometidos. Una causa benéfica donde los clientes se apuntaron a un buen rasurado y donde barberos y fotógrafos trabajaron por amor al arte y conciencia solidaria. Algunos de los ahora bigotudos conseguían verse la barbilla por primera vez en mucho tiempo. “Hubo un chico con una barba increíble fruto de varios años que al final se quedó solo con bigote”, relata Dani De Pablos, promotor de la idea.

Movember proviene de la contracción en inglés de moustache (bigote) y november (noviembre) y este evento anual tiene como objetivo “cambiar el rostro de la salud de los hombres”. El movimiento nació en Australia en el año 2003, cuando un grupo de jóvenes de Melbourne tuvo la idea de dejarse crecer el bigote para solidarizarse con un amigo afectado por cáncer de próstata. En 2004 se registró la Fundación Movember y comenzó el trabajo de concienciación sobre el cáncer de próstata y el de testículos. Tras el éxito de la iniciativa en Australia y Nueva Zelanda, el movimiento se ha extendido a otros muchos países, convirtiéndose en un acontecimiento global.

La barbería llevó a cabo la sesión de manera gratuita recogiendo solo donativos y varias decenas de vizcainos cambiaron de look con un buen rasurado y se dejaron retratar con menos vello facial. De hecho, son muchos los actores, músicos o deportistas que en los últimos años se han convertido en embajadores de Movember, dejando crecer sus bigotes, y ayudando a difundir el mensaje. Y es que en noviembre, cada pelo cuenta y los mostachos sensibilizan sobre la salud masculina.

La exposición fotográfica se llevará a cabo en la propia Barbería del Norte y mostrará a todos los clientes que pasaron el domingo por allí en un montaje de cuatro imágenes compuestas por el antes, el después y el durante de la sesión de afeitado y donde la foto más destacada será la definitiva con el bigote. La exposición permanecerá abierta todo el mes de noviembre y cuando este finalice, la gente decidirá si quiere comprar su fotografía para seguir apoyando la causa.

Imágenes todas ellas en blanco y negro porque, para estos profesionales, con estas características tienen más encanto y un estilo único y minimalista que les dota de mayor personalidad. “Desde que pensamos en estas fotografías ya decidimos que fueran todas en blanco y negro”, señala De Pablos, subyugado por estos tonos. Para potenciar la fuerza y energía de las instantáneas, no han elegido un fondo neutro sino un marco tipo ficha policial. “Buscando ideas, vimos justo una foto de un presidiario que nos apareció por internet y nos pareció un bonito juego. Así que optamos por fotografiarles sobre un panel con la estatura que pareciera el de unos antecedentes policiales”, destaca.

El germen de la exposición surgió, sin embargo, de manera casual. “Yo tenía previsto hacerlo con otro amigo que se iba a quitar la barba... y al final hemos colaborado tres profesionales”, explica De Pablos, un enamorado de las caras velludas porque opina que “una buena barba da mucha personalidad al rostro. Además es algo que ha estado muy de moda con los hipsters”. Él ya tiene experiencia en este tipo de retratos que representan esta tendencia facial “y hace años ya hice una serie que llamé precisamente barbudos” . Porque Dani De Pablos intenta buscar siempre una temática que sirva para unificar sus retratos, el género del que más disfruta este fotógrafo bilbaino afincado actualmente en Algorta.