LONDRES. Unicornios para simbolizar ideas fantasiosas, precipicios que representan la amenaza de una salida de la Unión Europea (UE) sin acuerdo o relojes de arena que avisan de que el tiempo se acaba son imágenes recurrentes en los chistes de estos maestros de la sátira, que, sin perder el humor, confiesan su agotamiento y frustración.

"A veces siento que en más de dos años y medio no he dibujado de otra cosa", admite Dave Brown, caricaturista de "The Independent", que calcula que, solo en las últimas seis semanas, ha publicado 27 viñetas del "brexit" frente a tres de otros temas.

"A menudo miro con anhelo otras noticias, pero sé que al final la portada será de lo mismo", ironiza, con la misma resignación que expresan Peter Brookes, en "The Times", y Jeremy Banx, del "Financial Times".

"Estoy hasta la coronilla. El chiste es lo aburrido que es todo", exclama Grizelda, colaboradora de las revistas "Private Eye" y "The Spectator", que culpa al "brexit" de todos sus males, "incluida la gripe" que actualmente la mantiene en cama.

No recuerda un tema tan repetitivo desde la crisis crediticia de 2008, "pero eso fue mucho más divertido, porque había mucha gente con quien meterse, especialmente los banqueros", rememora nostálgica.

Tener que hacer cada día un dibujo sobre el "implacable" e "interminable" proceso de salida de la UE, al que la mayoría de estos artistas, en general proeuropeos, se opone a nivel personal, tiene consecuencias para la salud.

"Ya no voy al trabajo con la ilusión de antes", lamenta Brookes, a quien da "un vuelco el corazón" cada vez que, sentado a su mesa, encara otro capítulo del culebrón británico-comunitario.

A Brown el asunto le trae quebraderos de cabeza "que serían muy reales si cediera a la tentación" de darse "cabezazos contra la pared", dice.

Pese a todo, son profesionales y su deber es encontrar inspiración: "Ayuda saber que tienes que pagar facturas", apunta Banx.

Brown señala que, "por el vocabulario periodístico del 'brexit', hay muchas metáforas que se han convertido en clichés, y el reto es encontrar nuevas maneras de usarlas".

Uno de sus chistes recientes, por ejemplo, emula una escena del filme "El Padrino", en la que la primera ministra, Theresa May, se despierta en su cama para descubrir no la cabeza degollada de un caballo, sino de un unicornio.

Este dibujante también ha caracterizado a la conservadora como el Coyote de los dibujos animados -cuyos drásticos planes para atrapar al Correcaminos siempre acaban en desastre- y como una "zombi" al frente de un Gobierno de muertos vivientes.

Mientras que Banx y Grizelda hacen chistes de bolsillo, de tamaño pequeño, Brown y Brookes hacen grandes dibujos satíricos en color, en los que caricaturizan a los políticos.

Ambos dicen que les resulta fácil representar a May, gracias, en palabras del primero, a sus marcados rasgos faciales de "ojeras, nariz aguileña y una boca flexible con la que hace multitud de muecas".

Ese aspecto poco atractivo, completado con sus largas uñas pintadas, famosos zapatos con estampado de leopardo y collares de pesadas bolas, a veces suscita quejas de lectores, que le tildan de "misógino", se queja Brookes.

"Antes que mujer es primera ministra, y merece ser satirizada; además, me cae mal", concede.

Brown cree que el hecho de que sea mujer hace que los directores de los diarios sean más cautos.

En su caso, le vetaron un dibujo que había usado antes con hombres, donde, en el contexto de las negociaciones con Bruselas, aparecía May debajo de una lluvia de orina procedente de Jean-Claude Juncker, transformado en el Manneken Pis o niño que orina de la capital belga.

Los viñetistas se muestran entre ansiosos y filosóficos sobre cómo acabará la saga del "brexit".

Mientras que Banx aspira a que el Reino Unido revierta la decisión de dejar la UE, Grizelda confía en que todo acabe pronto y Brookes desea un cambio de líder que le permita caricaturizar a otro político.

Brown aventura: "Mi predicción es que tarde o temprano, con o sin acuerdo, con más o menos certeza, nos iremos de la UE... o quizás nos quedaremos".