LOS cámaras, el director y la presentadora Arantza Garcés bromean para entrar en calor y presentar el programa. El director Fermín Aio le pide a Aran-tza que abra los ojos "y enseñe esa mirada felina, esos ojos de gata" y ella le responde que serán "ojos de cegata", porque mientras Kerman hace el travelling y Ager graba el sonido, Fermín sujeta un reflector debajo de su cara, para eliminar las sombras de la cara, y como le tienen cara al sol ya le empiezan a doler los ojos, porque además el lugar adecuado que han encontrado para tener un plano general del faro, está cerca de una obra y hay que aprovechar cada vez que se para la dichosa máquina.

Por fin llega el momento: "Hoy haremos rápel en el faro de Biarritz" empieza diciendo la periodista y presentadora. El día es soleado, apenas sopla el viento. No es un día perfecto porque según la radio la contaminación atmosférica es de 6 en una escala de 10 en la costa de Iparralde y después de subir la escalera del faro hasta parece que se nota la falta de oxígeno, pero no se ve esa neblina que hay en París, y sí la espectacular belleza del paisaje desde el ojo del mar.

En lo alto de la torre los técnicos de Asaken han preparado las cuerdas, los arneses, los ochos y los cascos provistos de cámaras para grabar el descenso. El de Biarritz no tiene la dificultad que tenía por ejemplo el capítulo que hicieron en el salto del Nervión, "de unos 300 metros" dicen. Sin embargo, este programa, que podrá verse el próximo verano, es también especial, como todos, porque además de Arantza y Fermín, que lo graban, rapelará el farero, Didier. Y le harán una entrevista mientras rapelan.

Otro de los cámaras de la productora Filmak, Oier Plaza, explica que es un programa de entretenimiento y aventura; pero, al mismo tiempo, es como un documental de cada lugar. Por ejemplo, en el capítulo que hicieron rapelando la secoya gigante del parque de Monterrón de Arrasate, cuentan la historia del Conde Monterrón, de cómo hizo fortuna en Perú, y muestran también imágenes históricas de secoyas y otros árboles gigantes y especiales, como el árbol Ginkgo Bilova, el único ser superviviente de la explosión nuclear de Hiroshima. En cada programa, Arantza entrevista a distintos expertos.

En el programa grabado en Biarritz, además del farero Didier, participa Veronique Bouyssou de la Sota, descendiente de armadores vascos y escritora de un libro de historia sobre el faro de Biarritz donde se ilumina el pasado de éste uno de los monumentos más antiguos de Biarritz, construido en 1843. Además de todo esto, el programa promete imágenes y perspectivas espectaculares. El piloto del octocopter Daniel Ojanguren, 3 veces campeón de España en acrobacias con naves radio-controladas, asegura la máxima seguridad y los mejores planos posibles, siguiendo las instrucciones que le da Kerman Goikouria, encargado del control remoto del dispositivo que mueve la cámara del drone.

Hoy el vuelo tampoco presenta mucha dificultad porque las condiciones son óptimas y las distancias pequeñas, pero otros capítulos, como el que grabaron en el cabo Ogoño, requieren mucha destreza a la hora de gobernar el aparato, que se vuelve un pequeño punto según se aleja del lugar desde donde se le controla. Las medias lunas que recorre el drone alrededor del faro, Arantza Garcés con sus ojos y su cuerpo de gata bajando la torre de 44 metros, entrevistando con su lengua mordaz a Didier el farero con el mar y Biarritz de fondo, mientras Fermin "disfruta como un niño" según Elena, que se ocupa de los permisos y los guiones, con Daniel y los de Asaken dispuestos a lucirse y colocar su impronta aportando un máximo de seguridad a la aventura. El equipo rueda con suavidad poco a poco, y "es muy bonito, muy bonito" dice con acento francés la guía de un matrimonio de ricos extranjeros que se pasean por el lugar.