Bilbao. Desaparecido en combate durante la guerra de Irak y dado por muerto desde entonces, el sargento Nicholas Brody es rescatado y devuelto a su hogar convertido en un héroe nacional. Víctima de años de tortura en manos de Al Qaeda, está marcado física y emocionalmente por los recuerdos de su cautividad. Carrie Anderson, una agente de la CIA con un trastorno bipolar que lucha contra sus propios demonios, está convencida de que la información que condujo al rescate del soldado es una trampa y que el soldado puede estar conectado a una trama de una organización yihadista que planea atentar nuevamente en EE.UU. Sospechando que Brody puede haber abrazado la causa árabe, Carrie se saltará el protocolo para tratar de demostrar que puede suponer una gran amenaza para su propio país. Esta es la cuestión a la que trata de dar respuesta Carrie Mathison en Homeland, aclamada ficción de espionaje que Cuatro estrena esta noche y que anteriormente pudieron ver los espectadores de Fox España. El canal de Mediaset emitirá seguidas las dos temporadas que hay hasta la fecha a razón de dos capítulos cada miércoles. La neoyorquina Claire Danes y el británico Damian Lewis dan vida a la arriesgada y obsesiva agente de inteligencia y al marine desaparecido en combate y rescatado años después en esta serie de intriga que descubre cómo operan las agencias de inteligencia, las organizaciones terroristas internacionales y los resortes del poder.
Nada es lo que parece en esta adaptación estadounidense de la ficción israelí Prisioneros de guerra, que aúna drama familiar y espionaje y que se alza como uno de los mayores éxitos de Showtime al reunir a más de un millón de telespectadores en su debut, dato que la convierte en el mejor estreno del canal por cable estadounidense en los últimos ocho años. Este canal, que ya ha emitido la segunda temporada, ha renovado Homeland por una tercera. Las emociones, expectativas y fragilidad que destilan sus personajes, unidas a un excelente guión, la extraordinaria interpretación de sus actores y la acertada puesta en escena de este thriller político han cautivado a la crítica internacional que ha distinguido a la ficción con cinco Globos de Oro y seis Premios Emmy, entre otros galardones. Además de conquistar a la crítica internacional, Homeland se ha ganado el favor del público estadounidense. Si la emisión de su capítulo inaugural congregó a 1,08 millones de espectadores, el último episodio de la primera temporada fue seguido por 1,71 millones de telespectadores, dato que supone el mejor final de temporada de una serie nueva en la historia de Showtime.
