Bilbao. A las 22.30 horas llega a la cadena de Planeta la tercera temporada de una de las series británicas más aclamadas de la historia, Downton Abbey, y lo hace menos de tres semanas después de su conclusión en la cadena ITV porque, aunque mucha gente cree que se trata de una serie de la BBC no es así. Se trata de una producción de Carnival Films and Television (filial de NBC Universal) para la citada ITV, la cadena de televisión comercial más antigua del Reino Unido y competencia de la todopoderosa BBC desde el año 1955.

En los ocho nuevos capítulos (más un especial navideño) hay muchas novedades, pero la más significativa es la incorporación de la actriz estadounidense Shirley MacLaine como la madre de Cora, que viaja desde Nueva York a Inglaterra para la boda de su nieta Mary con Matthew. Precisamente, su relación con su consuegra Violet -el personaje de Maggie Smith-, dará lugar a algunos de los mejores momentos de esta etapa. "Tengo tantas ganas de ver a tu madre. Cuando estoy con ella, recuerdo las virtudes de ser inglesa", le dice impertérrita Violet a su nuera. De hecho, uno de los méritos de Downton Abbey es la contraposición del carácter inglés y del estadounidense, que de momento solo se había explotado a través de Cora, la madre de Sybil, Edith y Mary. El duelo interpretativo de MacLaine y Smith, dos actrices nacidas casualmente en 1934 y una ganadora de un Oscar y otra de dos, engrandecerá aun más una serie cuya anterior temporada acabó con el funeral de Lavinia, la enfermedad de Carson, la muerte de William y la detención de Bates "por el asesinato premeditado de su esposa". También queda por ver cómo encajará la familia el romance de lady Sybil con el revolucionario chófer Tom Branson porque, como aseveró la condesa viuda de Grantham, "la aristocracia no ha sobrevivido por su intransigencia. Debemos trabajar con lo que tenemos y mitigar el escándalo".

Otra novedad de esta temporada será la incorporación de dos nuevos criados, Alfred y Jimmy. El primero de ellos es un joven demasiado alto para disgusto de Carson, quien piensa que "ningún lacayo puede medir más de 1,85". Es el sobrino de una de las villanas de la serie, la señorita Sarah O'Brien, quien junto con el sirviente Thomas Barrow forma un dúo maléfico del tipo la vieja'l visillo de José Mota, pero más siniestro. El otro nuevo criado no es tan alto, pero es tan guapo que no solo atrae la atención de todas las chicas del servicio, sino también de Thomas.

inicio La temporada arranca con malas noticias económicas para lord Robert Grantham, cuya inversión durante la I Guerra Mundial en una compañía canadiense de ferrocarriles ha resultado un fiasco que puede llevarle a la ruina e incluso a perder Downton Abbey. No está en buena racha porque, además, al final de la segunda temporada tuvo que prescindir de Jane, una doncella de la que había empezado a enamorarse; y aceptar a regañadientes tener a un chófer como yerno, ya que no puede vencer la testarudez de Sybil y tampoco quiere perderla para siempre. ¿Podrá ser la millonaria madre de Cora la solución a sus problemas?