El Juzgado de Bilbao acoge este jueves la vista de reclamación de daños y perjuicios por parte de la familia de un bombero fallecido por asbestosis, tras “toda una vida laboral trabajando de bombero”, desde 1974 a 2016.
La Asociación de Víctimas de Amianto de Euskadi, ASVIAMIE, se concentrará a las 11.30 horas en apoyo a la familia. Según explicaron en una nota, la familia reclama a la Diputación 174.203,64 euros en dicho concepto a favor de la mujer y los hijos del fallecido por no haber adoptado durante décadas las medidas de prevención pertinentes.
La asociación explicó que el informe de autopsia realizado por Osakidetza en marzo de 2023 apunta en el apartado de diagnóstico final “asbestosis, fibrosis pulmonar bilateral difusa severa con adherencias pleuro pulmonares, detección de 1.005 cuerpos ferruginosos de tejido seco”. Además, se recoge que en mayo de 2024 la Seguridad Social dictó resolución reconociendo “las prestaciones de muerte y supervivencia derivadas de enfermedad profesional”.
"Patologías posiblemente relacionadas con el amianto"
Según explicó la Asociación de Víctimas de Amianto de Euskadi, y citando el informe a fecha de 28 de diciembre de 2023 respecto a la investigación realizada por Osalan, “en los últimos años se han realizado varios informes de trabajadores que ocuparon distintos puestos en la extinción de incendios, afectados por patologías posiblemente relacionadas con el amianto”.
En la misma nota, ASVIAMIE recoge el testimonio de un trabajador en un informe del año 2018 en el que señaló que “dice que apagaban el fuego de empresas llenas de uralita y que tenían revestimientos de amianto”.
Asimismo, según relató la Asociación de Víctimas de Amianto de Euskadi, el trabajador aseguraba que el chaquetón y los guantes ignífugos “eran de amianto” y que, “casi hasta los años 90, llevaba la ropa a lavar en casa, incluso la ropa de intervención”. En este sentido, más tarde comenzaron a llevar a una lavandería los chaquetones y pantalones de intervención. “Los pantalones interiores, camisas y chaquetillas los llevaban a casa a lavar”.