LARRABETZU. El alcalde de Larrebetzu, Iñigo Gaztelu, ha explicado que, de las dos mujeres que se encuentran ingresadas, la más grave sufre rotura de la tibia y el peroné en ambas piernas, mientras que la otra será dada de alta previsiblemente esta tarde, tras haber sido sometida a varias pruebas médicas.

Además, un tercer hombre que ha resultado herido ha sido dado ya de alta y se encuentra en casa con un brazo roto. Por su parte, una cuarta persona ha sufrido varios rasguños, pero no ha requerido atención hospitalaria.

Las heridas de los cuatro se produjeron al caer hacia adelante la monumental cruz, de varios metros de altura y construida en piedra, cuando estaba previsto que cayese hacia uno de los costados.

El mandatario de EH Bildu ha recordado que, para llevar a cabo el derribo de este recuerdo franquista a los muertos de su bando en los combates previos a la toma de Bilbao, el Ayuntamiento abrió expediente y contrató para su demolición a una empresa privada y a un responsable de seguridad.

El Consistorio había convocado a los vecinos para que presenciaran la demolición de la cruz y, durante estos trabajos, había delimitado un perímetro de seguridad para prevenir posibles accidentes.

Sin embargo, según ha explicado, por causas que se desconocen el monumento se ha venido abajo de frente, por lo que algunas de sus piedras han salido proyectadas hacia el público que presenciaba el derribo, alcanzando a cuatro de las personas -dos hombres y dos mujeres- que se encontraban congregadas en el lugar de los hechos.

De estas cuatro personas, dos fueron trasladadas en ambulancia a los hospitales de Galdakao y Cruces, respectivamente, mientras que una tercera acudió al centro hospitalario de Galdakao por sus propios medios.

En una nota, el Ayuntamiento de Larrabetzu ha expresado su "solidaridad y total apoyo" a los heridos en el accidente, a cuya disposición se ha puesto "para todo lo que necesiten".

De igual forma, el Consistorio ha recordado que se habían tomado "todas las medidas técnicas y de seguridad para el derribo" y ha apuntado que, en el momento del accidente, había en la zona un coordinador de seguridad.

"Lamentablemente, aún cumpliendo todas las medidas, ha ocurrido este desgraciado accidente", ha reseñado la Institución local en este comunicado.

Técnicos municipales se reunirán con responsables del derribo para analizar las causas del siniestro.

La cruz fue construida en la cima del monte Gaztelumendi como homenaje a los caídos del ejército franquista después de que, en 1937, fuera roto en Larrabetzu el llamado "Cinturón de Hierro", una línea defensiva organizada por los "gudaris" vascos para proteger Bilbao del avance de las tropas golpistas.

El pasado 26 de abril, el Ayuntamiento de Larrabetzu acordó en pleno, por unanimidad, derribar esta cruz, debido a su "simbología y situación de ruina y posibilidad de derrumbe inminente".

Además, decidió que, una vez que fuera retirada la cruz, fuera instalada en esta zona una placa o escultura en recuerdo de los combatientes caídos "por la libertad y contra el fascismo".