Quien tiene o ha tenido un perro sabe de la fidelidad que tienen los canes y que son capaces de cualquier cosa para estar con sus dueños. Una prueba más la ha ofrecido Lucky, una border terrier de una edad avanzada (14 años) que se recorrió hace unos días 163 kilómetros en una sola noche tratando de encontrar a su familia. Sus dueños se habían marchado de vacaciones a Alemania y la habían dejado con un amigo suyo, que se la llevó a su casa.

Se ve que Lucky echaba de menos a los suyos, porque la noche del 31 de julio escapó de su domicilio provisional y emprendió una carrera difícil de imaginar, que la llevó de los alrededores de Berna, la capital de Suiza, al lago Leman, junto a Ginebra, según explica un periódico de esta ciudad, La Tribune de Genève. Nada menos que 163 kilómetros sola y durante la noche hasta que a las 9 de la mañana alguien la vio por las inmediaciones del lago, con pinta de estar exhausta, y llamó a la Policía, pensando que se habría escapado de una casa cercana.

Cuando los agentes llegaron vieron que el animal tenía microchip y comprobaron con asombro que procedía de muy lejos, incluso de otro cantón. Consiguieron dar con su familia gracias a la información del microchip y la llevaron de vuelta a Berna. Parece increíble que Lucky pudiera, sobre todo a su edad, recorrer semejante distancia y en tan poco tiempo, aunque es cierto que los border terrier destacan por su gran resistencia y por unas largas patas que les permiten correr muy rápido.