Puigdemont alimenta su regreso: “Fui al exilio por idéntica razón por la que volveré”

Junts ha dejado claro que el aún eurodiputado es su opción número uno calculando que su vuelta podría darse coincidiendo con el debate de investidura, hacia finales de junio, una vez entre en vigor la medida de gracia hacia los afectados por el procés. Eso significaría que durante la campaña aún no podría retornar sin riesgo de ser detenido, pero las cosas podrían haber cambiado entrado el verano, si bien todo dependerá de cómo decidan los tribunales aplicar la amnistía. Tampoco es descartable la secuencia de poder plantarse en tierras catalanas y ser arrestado. “In spe, contra spem (En la esperanza, contra la esperanza)”, añade en el apunte en la red social X, donde defiende que su compromiso político se ha mantenido indeleble. En el acto de Elna Puigdemont comparecerá arropado por la plana mayor de su partido, lo que evidencia la trascendencia del mismo, más aún cuando el secretario general de Junts, Jordi Turull, ya ha manifestado que “tenemos la esperanza de que en los próximos días se abrirá una etapa de ilusión y esperanza, tendremos al mejor candidato para definir los cuatro años que vienen, un presidente con la nación en la cabeza y en el corazón”, un candidato que aportará “ambición de país y solvencia”, no solo para relanzar el procés sino también para “recuperar el prestigio de los servicios públicos”, tras los años de gobierno de Esquerra.

Comín, para las europeas

Carlos Boye, abogado de Puigdemont, también baraja la posibilidad de que si los números abren la posibilidad de que su representado lidere la Generalitat y pueda ser investido, sea detenido cruzando la frontera. “Cuando el president tome una decisión la va a llevar hasta el final, eso significa que se va a plantar donde se tenga que plantar”, vaticinó el letrado, matizando que este es el “miedo” y el “nerviosismo” de Pedro Sánchez y del propio Aragonès. Entre tanto, JxCat busca cómo colocar un sustituto para las europeas del 9 de junio y todo apunta a que será el eurodiputado Toni Comín, toda vez que él mismo se postula. “Es prematuro decirlo todavía, pero hemos pensado que si él (Puigdemont) no puede encabezar la lista de las europeas, lo haga yo”, aseveró en declaraciones a Vilaweb. “Entiendo que le dé tranquilidad que, si se confirma que él se tiene que ir al Parlament, en el Parlamento Europeo se quede la persona con quien ha estado trabajado y luchando juntos estos años, que soy yo. Su idea y la mía es que pueda encabezar la lista europea si no lo puede hacer él”, subrayó, al tiempo que se refería a un retorno conjunto del exilio en compañía del exconseller Lluís Puig: “Es el retorno político, volvemos juntos, y lo que le tenemos que explicar al país con este regreso lo tenemos que hacer juntos”.

En este contexto, ERC espera desmontar las encuestas y enarbolar el trabajo y la figura de Aragonès. “Sabemos que es el rival a batir por parte de aquellos que quieren no cambie nada y que siguen defendiendo el modelo del Estado español, y también por parte de los que defienden los privilegios de unos cuantos”, afirmó la portavoz republicana Raquel Sans, segura de que el líder de su formación será el blanco de todas las dianas. “Van a salir publicaciones en todos los sentidos, algunas interesadas. Todo el mundo usará todas las herramientas para batir a Aragonès”, comentó.

Illa, figura “transversal”

En el otro flanco de la izquierda, el encabezado por el constitucionalista Salvador Illa, el líder del PSC se reivindica como candidato para una mayoría transversal que quiere un autogobierno fuerte, alegando que la sociedad catalana “no está” en la vía de la unilateralidad que Junts y ERC siguen defendiendo como una posibilidad. “La sociedad catalana no está en esto, está en otra cosa”, destacó en TVE. “La Catalunya que pasa página se está abriendo paso, esa que quiere abrir un tiempo nuevo. Pasar página quiere decir unir a los catalanes y servir a los catalanes. Vengan de donde vengan los catalanes, hayan nacido donde hayan nacido, hablen la lengua que hablen, sientan como sientan”, argumentó el exministro, que evitó entrar al trapo del posible regreso a la arena electoral de Puigdemont.