Cuando mañana concluye la campaña electoral en Galicia, el PP, que aspira a permanecer a los mandos de la Xunta una legislatura más, encara estas horas cruciales con el viento de frente, no de cola. Desde el fin de semana pasado está escuchando cómo el resto de partidos le tachan de “hipócrita” por defender en público una postura beligerante contra la amnistía a los imputados del procés cuando, en privado, estudió su viabilidad.

Mientras esta contradicción lo está cubriendo todo durante la semana final de la campaña, anoche se visualizó la soledad en la que se encuentra el candidato popular, Alfonso Rueda, con el debate electoral que se celebró en RTVE entre los principales aspirantes a presidir la Xunta, y al que Rueda rechazó asistir. En la práctica supuso, por tanto, un cara a cara entre Ana Pontón (BNG) y José Ramón Gómez Besteiro (PSdeG), que aprovecharon para cargar contra el ausente.

Así, el aspirante socialista propuso fijar “por ley” el deber de participar en los debates organizados por los medios públicos “por respeto a la ciudadanía y como muestra de salud democrática”. Besteiro subrayó que “Galicia no merece un presidente que huye de los debates electorales” y que opta por estar “escondido, sin dar la cara y poniendo excusas de mal pagador”.

Por su parte, la cabeza de lista del BNG, Ana Pontón, señaló que “el nivel de nerviosismo del PP está superando todo lo que se podía imaginar en esta campaña” tras difundir un vídeo en la que la equiparan con el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi. “Cuanto más nivel de nervios del PP quiere decir que el cambio es imparable, estoy absolutamente convencida”, enfatizó.

El vídeo del PPdeG dibuja un BNG que es “lobo con piel cordero”, con imágenes de ERC y de la manifestación en favor de los presos de ETA. Pontón respondió que “a mí lo que me preocuparía es que me comparen con un partido de extrema derecha, en contra de que el gallego se pueda usar en este país o que está condenado por corrupción”, y reprochó por último que el PP “no tiene ningún candidato que se presente a los debates”.

La candidata de Sumar a la Presidencia de la Xunta, Marta Lois, cargó a su vez contra el debate pero por su exclusión del mismo. Así, lo calificó de “lamentable” y de “escenificación vacía de una conversación que no refleja la realidad gallega”. “No es realmente un debate”, zanjó, después de que la Junta Electoral Central diera la razón a RTVE tras su impugnación por parte del partido de Yolanda Díaz.

Alfonso Rueda aseguró que no seguirá el programa porque a esa hora tiene actos programados, y reiteró su disposición a participar en un debate “cara a cara” con tan solo un contrincante, aquel que las formaciones de izquierda, entre ellas BNG y PSdeG, decidan. Ese portavoz representaría, argumentó, a todos los partidos que formarían parte del gobierno gallego si el PP perdiese su mayoría absoluta.

Mentiras de Feijóo

Sobre la controversia de la semana, el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, aseguró que “las mentiras” de Feijóo sobre las negociaciones con Junts “han acabado desmantelando” la campaña del PP gallego. Apeló además a la movilización del electorado “progresista” para lograr un “cambio” en la Xunta en el que “el voto a Sumar va a ser decisivo”.