El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha afirmado que existe "un contexto de confrontación y represión por parte del Estado español" y ha advertido de que no se dejará "intimidar": "A los que hemos decidido ir al grano nos persiguen con acusaciones delirantes", ha asegurado.

Puigdemont opta a la reelección como presidente del Consejo de la República, organismo parainstitucional que él mismo lidera desde Bélgica, y deberá competir con Jordi Castellà y Lluís Felipe Lorenzo en las elecciones que se celebrarán del 5 al 14 de febrero.

En declaraciones a la página web del Consejo de la República, Puigdemont ha señalado que el organismo "puede jugar un papel importante en la recuperación de la unidad estratégica" del movimiento independentista, y ha dicho que trabajará para "sumar a todos los actores" en el "objetivo común de la Republica catalana independiente".

"Ahora bien, tampoco se puede convertir en un pretexto para no avanzar. Aquellos que no quieren la unidad no tienen que tener derecho a veto a la acción independentista. Nosotros somos los máximos defensores de la unidad, pero no a costa de renunciar a nada", ha dicho Puigdemont.

Además, Puigdemont ha indicado que el Consejo debe continuar "trabajando para internacionalizar la causa catalana y ganar apoyos en el exterior".

Las elecciones llegan en un momento en el que Puigdemont ha cobrado protagonismo político de nuevo a raíz de las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez, que las bases del Consejo apostaron por "bloquear".

Microestado en Argelia y la 'vía guineana'

Los otros dos candidatos que competirán con Puigdemont también han presentado sus respectivos programas de acción, en los que figuran dos propuestas diferentes para conseguir la independencia: crear un microestado en Argelia y apostar por la 'vía guineana' para conseguir el reconocimiento internacional.

Lluís Felipe Lorenzo propone la creación de un microestado en el barrio de Bab-el-oued, en el que se "hablaba catalán hasta hace 60 años, con el único requisito de que el catalán sea la única lengua latina oficial y mantener la libertad religiosa", según figura en la web del Consejo.

A largo plazo, el objetivo de este estado sería "reunificar los Países Catalanes" y lograr "una confederación con Occitania y un tratado de cooperación con el principado de Mónaco".

Por su parte, Jordi Castellà incluye en su programa de acción política la solicitud para reconocer a Catalunya como "territorio no autónomo" ante la asamblea general de Naciones Unidas, como hizo en 1968 Guinea Ecuatorial.

Además, propone solicitar a la ONU la "descolonización e independencia de Catalunya si el Estado español persiste con su hostilidad y falta de reconocimiento".