BILBAO. El Gobierno de Euzkadi potenció el euskera durante la guerra civil entre los batallones de gudaris. A cada uno de los soldados vascos, en su tarjeta militar -gudari txartela-, el Departamento de Defensa les aportaba una serie de expresiones en euskera y su significado equivalente en castellano. En total eran quince los vocablos y órdenes de mando, como pueden apreciarse en documentos conservados de aquella época.
La lista se abre con la orden de presenten armas y descansen armas que publicaron como agertu izkiluak y jetxi izkiluak (sic). Otros imperativos descritos fueron rodilla en tierra -belauniko-, sentado -eserita- o tendido -etzinda-. El Departamento de Defensa traducía fuego a discreción como suanai ala y el alto el fuego como geldi sua. El resto de órdenes eran armas sobre hombro que se utilizaría como sorbaldara izkiluak; rindan armas como errenditu izkiluak; carguen armas como jarri karga y descarguen kendu karga.
Las fichas de los gudaris acreditaban el nombre del soldado, su procedencia, año, estado civil y la fecha de su incorporación al batallón correspondiente.