La localidad riojana de Badarán, de apenas 500 habitantes y ubicada a unos 37 kilómetros de Logroño, vivió este pasado sábado una jornada festiva con motivo de la inauguración de la pena del Athletic con el nombre del municipio y que de salida cuenta con aproximadamente un centenar de socios y socias. Y entre los numerosos actos programados se incluyó la celebración de un festival de pelota en cuyo estelar rivalizaron los exprofesionales Mikel Goñi y Titín III, con un apretado y divertido triunfo del primero por 21-22 en compañía de Alduntzin, mientras que su oponente compartió gerriko con Miguel Merino, otro ex de la empresa Aspe.
La cuestión es que, después de la sesión matinal, en la que se presentó oficialmente la peña del Athletic y tras la que se celebró un almuerzo popular en el que los y las comensales pudieron regar las viandas con caldos de Badarán y disfrutar de las canciones de la charanga La Brigada, según información difundida por la web NueveCuatroUno, casi la totalidad de los asistentes se desplazaron al frontón para disfrutar de una entretenida velada pelotazale.
En el estelar, Mikel Goñi y Aitor Alduntzin derrotaron a Titín III y Merino por un ajustado 21-22, un triunfo con tintes épicos porque además tuvieron que remontar desventajas importantes, como un 20-14 y un 21-18 adversos. Fue un partido en el que, pese a los 48 años del baztandarra y los 56 del riojano, ambos intercambiaron genialidades, aderezado todo ello con errores clamorosos y protestas marca de la casa, pues los dos siempre tuvieron carácter en sus respectivas etapas como profesionales de la pelota a mano.
El frontón se llenó para la ocasión y en la grada se pudieron ver un montón de camisetas del Athletic. No en vano, el partido se organizó con motivo de la inauguración de una peña del club bilbaino en Badarán, que, desde el sábado, además del Athletic, también son de Mikel Goñi. De Titín, por eso de ser riojano, ya eran un poco antes.
Espectáculo asegurado
Tanto Mikel Goñi como Titín III, el apodo como pelotari de Augusto Ibáñez Sacristán, siguen matando el gusanillo de la pelota unos cuantos después de haber colgado el gerriko. Tanto uno como otro hicieron carrera en la empresa Aspe, aunque la carrera del baztandarra resultó algo más agitada que la del riojano, más por asuntos extradeportivos que por temas deportivos.