Iker Izagirre, del club Lapke de Lazkao, y Adrián Uriarte (Lezama) se proclamaron ayer campeones del XXXVI Torneo Cafés Baqué de mano individual para promesas tras imponerse respectivamente en las finales de categoría cadete y juvenil disputadas en el frontón Ezkurdi. El recinto durangarra presentó una bonita entrada para asistir a la cita cumbre de una de las competiciones con más solera del campo aficionado.

En el duelo de cadetes, Izagirre logró llevar el juego a su terreno, contrarrestando el mayor poder de su rival, Unax Ramírez (15-18). El pelotari del Kurene de Sopela quiso imponerse en el peloteo, pero no supo encontrar altura en un frontón que se prestaba a ello. El delantero guipuzcoano, que se defendió a la perfección, salió mucho más enchufado y tomó una importante renta gracias a un 1-9. Ramírez no estaba por la labor de arrojar la toalla e insistió con su pegada, logrando poner en apuros a su rival y alcanzado el 10 iguales. Pero de nuevo se hizo Izagirre con el mando y con una tacada de cinco tantos se fue a un 10-15 que el vizcaino ya no pudo remontar. Apuró sus opciones hasta el 15-17, pero no fue más allá.

La final juvenil tuvo mucha menos emoción, pues fue un monólogo de Adrián Uriarte ante un impotente Aner Iglesias (3-22). El del club Upo Mendi de Zaratamo peleó lo que pudo, pero se vio arrollado por el de Lezama, superior físicamente. Uriarte fue capaz de alargar el pelotazo para mantener a raya a su contrincante, a quien además hizo mucho daño con su saque, jugada con la que firmó siete tantos directos. En un visto y no visto alcanzó el cartón 22.