Murray y Kerber, ante la prueba de Australia

EL Abierto de Australia que comenzará este próximo domingo en el Melbourne Park servirá para que Andy Murray y Angelique Kerber estrenen su condición de números 1 de mundo en un Grand Slam. El escocés y la alemana quebraron el orden establecido en el último tercio de 2016 y ahora les llega la oportunidad de consolidarse y de defender una posición que les convierte desde ya en los enemigos a batir.

Kerber lo tendrá más complicado ya que defiende el título que logró el año pasado y que fue el paso que le lanzó hacia su puesto actual. La tenista de ascendencia polaca ha cedido pronto en las citas previas de Brisbane y Sídney, pero de su espíritu estajanovista cabe esperar un buen rendimiento en el Melbourne Park. Además, saca casi 1.800 puntos a Serena Williams y más de 3.400 a Agnieszka Radwanska, las otras dos jugadoras que completan el podio, por lo que puede permitirse un tropiezo, siempre que no sea muy temprano.

El circuito femenino está muy igualado y entre las diez mejores del mundo solo Karolina Pliskova y Agnieszka Radwanska han arrancado con fuerza el año, pero ya se sabe que esta época supone en aquella parte del mundo una prueba de resistencia. Casi nadie quiere gastar más fuerzas de las necesarias y los resultados son imprevisibles. En este sentido, Garbiñe Muguruza ha vuelto a los entrenamientos ya en Melbourne tras tener que abandonar por lesión en el abductor su semifinal en Brisbane y lo ha hecho con la sensación de que va “mejorando”. La vasco-venezolana espera el sorteo de mañana en el que será séptima cabeza de serie con el deseo de superar la tercera ronda del año pasado y mejorar posiciones para afrontar en mejores condiciones los torneos sucesivos. También estará en el cuadro principal Lara Arruabarrena, que cayó ayer en la segunda ronda de Hobart y quiere superar el puesto 61, su mejor ranking de siempre.

batalla a dos En la ATP la batalla es exclusiva entre Andy Murray y Novak Djokovic, separados por 780 puntos. El serbio tiene toda la presión porque, como defensor del título, solo puede perder puntos en el Abierto de Australia. Para desbancar de nuevo al británico, que parece que se está tomando las cosas con calma, necesitaría repetir título y que Murray no alcanzara las semifinales. En el primer duelo del año entre ambos, la semana pasada en Doha, ganó Djokovic, aunque todo apunta a que esta pugna por el número 1 puede prolongarse hasta final de año.

Para evitar que el curso sea un monótono diálogo a dos entre Murray y Djokovic en los torneos importantes, se espera regularidad en Milos Raonic, Stan Wawrinka o Kei Nishikori, la progresión de la nueva generación, la de los Thiem, Kyrgios, Pouille, Zverev y compañía, y se cuenta con que Rafa Nadal y Roger Federer eleven sus prestaciones. El sorteo podría emparejar al balear y al suizo ya en la tercera ronda del primer Grand Slam y ponerles en el camino de los dos gallos actuales en cuartos de final o antes para añadir morbo a un torneo lleno de incógnitas.