El caro viaje hacia la gloria de los tenistas vascos
LA federación vasca de tenis trabaja para apoyar a los tenistas vascos en su formación y proporcionarles una pequeña ayuda económica de cara a sus diferentes compromisos
Bilbao - Iñigo Santos y Lucia de la Puerta son los nuevos campeones de Euskadi absolutos de tenis. Las pistas de tierra batida del Club de Tenis San Sebastián pudieron presenciar un torneo lleno de calidad, en el que los tenistas más jóvenes protagonizaron la sorpresa agradable del campeonato al copar los puestos más altos. “Todos los jugadores son muy jóvenes y podemos decir que ha habido una pequeña revolución”, afirma Igor del Busto, presidente de la Federación Vasca de Tenis. El tiempo no acompañó durante los días de competición, haciendo que el viento y la lluvia obligaran a cambiar algunos horarios previstos, aun así, el certamen se pudo sacar adelante gracias a la buena coordinación de los organizadores. “Hay que destacar la buena organización del torneo. A pesar de la mala climatología todo salió bien y se pudo ver un tenis de mucho nivel”, declara Del Busto.
De la Puerta encabeza la nueva hornada de tenistas vascos. Una generación que no cuenta con el honor de tener campeones de España, como ocurrió hace unos años, pero que aspiran a subir escalones poco a poco. “Son meritorios y entrenan muy duro. Además de Lucia, también está Ane Mintegia, que aspira en un futuro a dar el salto”, cuenta Del Busto. Los sueños de estos jóvenes deportistas es alcanzar el éxito que han cosechado otros grandes tenistas vascos. Dejando de lado el particular caso de Garbiñe Muguruza, “que no se ha formado con nosotros, pero a la que esperamos con los brazos abiertos”, los principales referentes de Euskadi son la tolosarra Lara Arruabarrena, número 87 del mundo, y el hondarribitarra Iñigo Cervantes, que está a punto de entrar en el Top 100 mundial. “El tenis es un deporte que se practica en todo el mundo y existe una profesionalidad brutal y una competitividad terrible. Por eso hay que destacar el mérito que tiene estar entre los cien mejores del ranking”, resalta el presidente de la Federación Vasca, que recuerda que “hace mucho que no tenemos a dos jugadores a ese nivel”.
El principal problema con el que se chocarán estos aspirantes a tenistas profesionales será buscar la forma de poder pagar los numerosos costes a los que deberán enfrentarse. “El tenis de alto nivel es caro. Practicarlo a nivel profesional supone muchísimo dinero, sobre todo en el aspecto de los viajes, porque además, al ser jugadores muy jóvenes tienen que ir acompañados por el entrenador o los padres. Desde la federación nos gustaría ayudarles más, pero nuestros recursos son limitados”, apunta el presidente del organismo vasco. Pero el precio de este deporte no es económico, también hay que invertir mucho tiempo y hacer constantes sacrificios por intentar luchar por un premio que no siempre llega. Peaje que pagan los deportista y también sus padres. “Quiero resaltar el esfuerzo que hacen los padres por sus hijos, además ellos también tienen que esforzarse mucho porque con los torneos les quitan horas a sus estudios”, concluye Del Busto.