El cantante y actor Elvis Presley (Tupelo, 1935) popularizó El rock de la cárcel. El deportista Jon Karro (Abadiño, 1980), quiere democratizar el triatlón, es decir, que la prueba combinada pueda ser una realidad para toda la sociedad, también para aquellos que, aunque invisibles, sobreviven en los almacenes humanos que son los penales.

Si Karro ya ganó su pulso deportivo a la diabetes y participa como triatleta al más alto nivel, ahora ha logrado superar los muros y que su sueño se convierta en realidad. La próxima Semana Santa o en julio -la fecha no está cerrada- se celebrará el primer triatlón en el interior del Centro Penitenciario de Sevilla 1. Hacen historia. La dirección de la prisión le ha confirmado al vizcaino que cuenta ya con 25 bicicletas alquiladas para la cita deportiva que aunará kilómetros de carrera a pie, en bicicleta y nadando en la piscina del recinto hormigonado andaluz.

El de Abadiño está satisfecho con su logro, conseguido gracias también a la abogada sevillana Lola Fuentes y la agrupación Utopía. Karro presentó su proyecto en cárceles de Euskadi, pero según narra se encontró con un 'no' taxativo. "Aquí ha sido imposible". Pero, razonando que lo imposible es parte de lo posible, el vasco dejó rodar la idea por su mente, atar cabos, y la dirección penitenciaria de Sevilla. "Desde que vi en 1998 al cantante Rosendo en Gernika cuando acababa de grabar el disco en la cárcel de Carabanchel, tenía el objetivo de organizar un concierto en una prisión. Pensé en mis amigos del grupo Reincidentes", explica. 25 años después, su melodía se ha convertido en banda sonora deportiva para alrededor de treinta presos que "ya están dispuestos a participar". Correrán y pedalearán por un circuito intramuros y nadarán en la piscina que tienen los internos. "Me gustaría llamarlo TriLIBREman. Las cárceles son pocilgas con humanos. No buscan hacer mejor a la persona que está dentro".

Jon Karro, nieto de un miliciano antifranquista, tira de su apellido. Es un joven que siempre se marca metas espinosas, alambrada que se contrarresta con un punto de superación, de humanismo implícito, de tensar la cuerda del corazón y mente hasta que la sociedad oiga el grito solidario que busca. En esta ocasión, quiere aportar oxígeno a mentes presas. "En nuestra vida aquí fuera nadie se acuerda de los presos y las presas. Yo no quiero ir de Robin Hood, pero quién sabe por qué razón han tenido que delinquir muchos de ellos. Y lo curioso es que los que más roban, los grandes, como vemos a diario en los medios de comunicación, están en la calle".

La diabetes Su propia vida es ejemplo de superación. Karro, recuerden, fue el primer diabético que completó 650 kilómetros en carrera continua, non stop, sobre bicicleta. El vizcaino, además, fue el primer insulinodependiente que consiguió bajar el crono de diez horas en un Iron Man, en el Ironcat de 2011. Hace trece años, la vida se la jugó. Con exultantes 22 inviernos, su páncreas dejó de producir insulina. El exciclista del Baqué, batería del grupo Ze Arraio! y escalador de Abadiño entró en coma diabético. Días antes había perdido veinte kilos de peso. Fue aquella semana cuando debutó con la Diabetes tipo 1, o juvenil.

A día de hoy, da charlas sobre esta enfermedad y normaliza su compatibilidad con la factura de deporte. Y va más allá, compaginando su calendario para esta temporada con la novedosa iniciativa del triatlón en Sevilla. "Mi idea, para facilitar a la cárcel el proyecto, era un duatlón, pero nos dijeron que podría ser un triatlón, porque tienen piscina y que querían que así fuera. Su sueño, el de Lola Fuentes - secretaria de la Federación Andaluza Enlace- y la organización Utopía es llevar "algo de luz a los que están dentro".

El tándem Karro-Fuentes es imparable. El primero es abanderado del "siempre hay que intentar hacer el salto mortal" y la segunda deja por sentado un principio: "No hay derrota en el corazón de quien lucha". Ambos luchan por sus sueños, y en este año, pensando en que terceros también sueñen. Por ello, harán realidad el triatlón de la cárcel, con una posterior charla de Karro y "la guinda sería que pudieran tocar, aunque sea en acústico, Reincidentes, que uno de ellos, Nacho Pujol, es triatleta", ilustra.