¿QUé hay detrás de la oleada de pinchazos a mujeres? Todavía se desconoce si el propósito es abusar de las chicas (todo apunta a que sí) o si se trata de una simple (y delictiva, en cualquier caso) moda nocturna. Pero la realidad es que salir de noche cada día resulta más complicado. Hace poco, me encontré un cartel en un bar de Romo que alertaba de que se habían detectado algunos casos de burundaga en la zona, lo que me puso los pelos de punta. Por mucho que algunos se empeñen en afirmar que es una leyenda urbana, la droga zombi circula entre nosotros. La lista de precauciones que hay que tomar es tan amplia que a este paso las jóvenes –y no tan jóvenes– van a acabar quedándose en sus casas: tapar la copa para que nadie vierta nada en ella, no salir sola... Bizkaibus y Bilbobus han implantado también las conocidas como paradas antiacoso. Se puede pedir al conductor que nos deje, dentro del itinerario, en el punto más cercano a nuestro domicilio. Así todo, las agresiones sexuales han subido un 48% en Euskadi respecto a 2019 y muchos de estos casos han sido por sumisión química. Pero el Código Penal considera que la administración de estas sustancias no es violencia, por lo que se tipifica como abuso y no como agresión. Algunas cosas, sobre todo cuando se trata de temas que nos afectan a las mujeres, nunca cambian.

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