NA cosa... quizá antes de cambiar de año deberíamos ver el tráiler de 2021; yo ya no me fío. Aunque después de un año horribilis hay cosas que no cambian; como la Lotería de Navidad, que está al caer si no confinan antes a los Niños de San Ildefonso. Espero que no suceda como el año pasado, cuando el primer premio salió a los veinte minutos de sorteo. Porque eso es como si te hacen un spoiler de una peli de suspense. El número que se ha agotado hace meses tiene que ver con este fatídico 2020. El 14320. Esta cifra fetiche coincide con el día en que se decretó el estado de alarma -14 de marzo de 2020- por la pandemia de coronavirus y el posterior encierro de casi cien días. En total, se han distribuido 1.720 décimos por toda la geografía. Me imagino el trajín de copias de décimos que deben circular por WhatsApp. Ya saben, el mejor premio es compartir... la decepción. Cuando no había redes sociales, un inmigrante pasó de no tener un euro a engordar su cuenta bancaria con 300.000. Otra de las historias más curiosas se originó cuando dos amigos sevillanos compraron dos décimos, uno en Madrid y otro en Sevilla. Y, como la suerte es caprichosa, los dos fueron agraciados con el primer y segundo premio. Algunos nacen con una flor en salva sea la parte. Ya verán ustedes cómo también este año, en el que todos queremos salud, a alguno le toca el Gordo.

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