Palestina: el dinero es de quien lo posee
LA amarga coexistencia de israelíes y palestinos en el Oriente Próximo ha llegado a transformar en realidad política un dicho judío : “el dinero es de quien lo posee?.” Y hoy por hoy, el dinero de la Autoridad Palestina está en poder de Israel.
Mejor dicho, no sólo está en poder de Israel sino que este le concede a la Autoridad sólo una parte del mismo, una parte que no sirve ni para vivir ni para morir. La medida es una represalia israelí por la petición palestina de adherirse al Tribunal Penal Internacional.
El que Israel recaude dineros palestinos - tasas aduaneras, gravámenes sobre importaciones y exportaciones, etc., - se debe a los acuerdos de Oslo (Protocolo Parisiense de 1994) - que preveían que el Estado israelí hiciese la recaudación y la entregase a la Autoridad Palestina, deducido un pequeño monto por gastos administrativos.
En realidad, tal acuerdo dejaba la viabilidad de Palestina en manos israelíes ya que esas recaudaciones representan cerca del 70% de los ingresos totales de la Autoridad. La súbita decisión israelí de este año de cobrarse directamente de esa partida las deudas palestinas por las asistencias médicas y suministros de agua y electricidad prestados por Israel (cerca de la mitad del dinero recaudado) determinó que los 180.000 funcionarios de la Autoridad han percibido apenas un 60% de sus salarios en lo que va de año, con la consiguiente drástica reducción del nivel de vida en el territorio.
El castigo israelí es tanto más duro, por cuanto a la retención de los dineros palestinos se han sumado las maniobras diplomáticas del Gobierno israelí cerca de los patrocinadores tradicionales de la comunidad palestina y esta ha dejado de recibir desde primeros de año tanto las partidas aduaneras que le corresponden, como la ayudas que venían percibiendo de gran parte las naciones más ricas del mundo musulmán.
De todas formas, la presión de las grandes potencias ha movido a Israel a prometer que en “los próximos días” entregará a la Autoridad Palestina 470 millones de $ del dinero retenido.