En Euskadi, ya hemos asistido a la partición de IU, antes Ezker Batua y ahora Ezker Anitza. En Madrid lo hemos visto con focos: Tania Sánchez, pareja de Pablo Iglesias, para más señas, abandona IU con tanto ruido mediático como puede. Y con más sigilo, en Andalucía, el partido de Juan Manuel Sánchez Gordillo, el peculiar alcalde de Marinaleda, abandona la coalición de izquierdas para, en principio, presentarse por su cuenta a las elecciones con la CUT o Candidatura Unitaria de Trabajadores.