El aplazamiento por razones “burocráticas” de la llegada a Euskadi de los niños y niñas saharuis provocó sorpresa e incertidumbre entre las familias acogedoras, según la Asociación.
Estaba previsto que su presencia se produjera el primer día de julio, circunstancia que se llevó a efecto varias semas después, el 17 J. El objetivo se basa en que estos adolescentes disfruten y mejoren su calidad de vida en las poblaciones vascas, y se aíslen de su estancia en campamentos argelinos.
“Existen planes para desprestigiarnos”,señalan los saharauis.