El fútbol, el negocio de unos pocos

Este domingo, después de ver por televisión el partido de fútbol entre el Real Madrid y el C. D. Almería, escuché las declaraciones del entrenador del Deportivo Almería, Gaizka Garitano, a preguntas de los periodistas, y la verdad sea dicha que me quedé anonadado, no me lo podía creer. El señor Garitano, y como digo, a preguntas de los periodistas sobre lo ocurrido en el terreno de juego, manifestaba: “Vosotros sois testigos de lo ocurrido y no puedo decir lo que pienso, porque si lo hago me sancionan”. Otro jugador del Almería declaraba: “Alguien ha decidido que este partido no debíamos ganarlo”. Después de oír las declaraciones del entrenador y de uno de sus protagonistas, así como lo visto en el terreno de juego, puedo decir, sin temor a equivocarme que en el fútbol mandan Florentino Pérez y tres más. Y es que el fútbol ha dejado de ser un deporte, con la complicidad del Colegio de Árbitros, para convertirse en una máquina de hacer dinero para algunos. Señor Garitano, no poder decir lo que uno ha visto y lo que uno piensa, nos traslada a tiempos que mejor no hubieran existido. En muchos campos hemos escuchado aquello de: “Así, así... así gana el Madrid”, y en algunos casos parece que sí es cierto.