Para mí la heroicidad está en hacer algo más allá de lo que te exige el buen hacer de tu profesionalidad, con altruismo y sin recibir remuneración por ello. Por eso creo que no hay que divinizar al gremio de esos magníficos profesionales del mundo de la sanidad, del abastecimiento, de la distribución de alimentos, de las empresas de limpieza... Solo están cumpliendo con su deber de forma exquisita, y es de agradecer. Todos los trabajos son necesarios y muy dignos, nunca se puede hacer de menos a ninguno, y ahora se está viendo cuáles son los más imprescindib les. Pero el olvido y la soberbia de buena parte de la sociedad los transforman de ángeles a demonios, cuando no son portada por su trabajo, si no por sus justas reivindicaciones laborales.