Este año después de a los Reyes Magos tenemos otra carta al presidente de EE.UU., Donald Trump, vamos a pedir una desaceleración económica que modere, es oportuno hacerlo, hay que dejar de impulsar guerras comerciales con otro gigante como China y un proteccionismo que creíamos olvidado. Se han creado con estas políticas las guerras comerciales. Los productores españoles de aceitunas, vino y otros productos que se les aplica el 25%, que ha resultado a cuenta de Airbus con Boeing. También ha afectado a Francia, con una globalización en la que las mercancías, capitales y servicios no tantos las personas, circulan sin trabas por la mayor parte del planeta parece anacrónico recurrir a las fronteras. Las barreras, más que generar riquezas, reducen e incrementan la pobreza. Su lema American first, con el que tuvo las llaves de la Casa Blanca, ha conseguido muchos adeptos. Estas barreras acaban encareciendo los productos y servicios de sus propios ciudadanos. De momento, los datos, hay una tasa de paro de 3,5%, aunque son distintos a los europeos. Según me advierten mis conocidos que será difícil el impeachment, pero será “muy próspero” para todos.
