Basta de engaños en el mundo taurino, no echemos solo la culpa de su situación a los antitaurinos ni a los políticos ignorantes y aprovechados. Qué pasa con determinados diestros y ganaderos, con empresarios y algunos críticos taurinos que solo se preocupan de ellos mismos, con sus tejemanejes, no importándoles ni el futuro de la fiesta ni con ello los espectadores. No han sabido adaptarse a los nuevos tiempos, a la evolución de la sociedad. Siguen anclados en el pasado con su fondo oscuro, donde todo valía, abusando de un público que tragaba y aún sigue tragando, pero que se va cansando y por ello no acude a las plazas. Lo están echando desde hace unos años. Esta es la realidad.
