Sí a la regulación en Internet
Soy un firme defensor, desde el principio, cuando era una idea impopular, de que Internet sea regulado
Iruñea
Bildu colocó a Joseba Asiron como alcalde de Iruñea con una moción de censura que apoyó el PSOE después de que Bildu votara a favor de Pedro Sánchez en su investidura sin pedir nada a cambio (ejem, ejem, guiño, guiño, codazo, codazo). Año y medio después, Karla Pisano se queja amargamente en el Diario Socialista de “la defensa sectaria, no de un proyecto político, sino de un partido” que hacen Bildu y su entorno. Ella misma reconoce que “cuando del PNV se trata, hasta el acto más marginal del último ertzaina de la fila tiene responsabilidades políticas. Todas ellas, sin embargo, desaparecen cuando de EH Bildu se trata”.
No, no valen
También Bildu junto al PSOE, ERC (que luego se desdijo), Sumar y Podemos, aprobaron una ley española de vivienda para una campaña electoral y sabiendo que su reglamento podía contraer la oferta. Pero, ¿qué más da si a la izquierda le vale con mencionar “la vivienda” para que parezca que hacen algo por ella? Sin hacer una defensa sectaria, como ha escrito Karla Pisano, me ha resultado muy interesante esto en El Blog Salmón: “El problema de la vivienda en España es el mismo que en Alemania o en toda Europa del Este”, y es, oh, sorpresa, “una oferta insuficiente”. Por lo tanto, “es un error pensar solo en soluciones locales”.
Debería de ser ilegal
La ley española de vivienda que aprobaron Bildu y el PSOE, entre otros, además de cometer el error básico de contraer la oferta, es insuficiente. Se queda corta. No interviene contra plataformas como Airbnb (en el centro del problema) ni contra los grandes tenedores, como Rubén Zaballos que en la web de La Sexta se presenta como “un propietario con más de 200 pisos” que asegura, sin sonrojarse, que “la gente me dice que mejor los destine a alquiler turístico’”. Me deja pasmado que simplemente sea legal que una sola persona (o sociedad) pueda acumular 200 viviendas sin que los impuestos, por ejemplo, le resulten asfixiantes.
Correcto
Enrique Dans ha escrito en su blog un post muy interesante sobre cómo “Trump lleva años presumiendo de que ‘América necesita un CEO’”, lo que considera “una pésima idea”. Y se explica: “Gobernar no es gestionar una cuenta de pérdidas y ganancias” “porque su misión no es maximizar beneficios ni elegir clientes, sino servir a todos, incluidos los que no te votan. Los incentivos en democracia son deliberadamente más lentos y complejos, por eso existen contrapesos que un CEO jamás aceptaría”. Pero hay otra circunstancia añadida muy interesante: el “historial” de Trump como empresario “es calamitoso”.
Sí a la regulación en Internet
Soy un firme defensor, desde el principio, cuando era una idea impopular, de que Internet sea regulado. Y hoy, más: esta semana un streamer ha muerto en directo después de completar “un desafío llamado ‘10 Días y Noches de Tortura’, basado en pruebas de resistencia física, privación del sueño y consumo de sustancias supuestamente tóxicas” (El Confidencial). Raphaël Graven retransmitía esas barbaridades en la plataforma Kick, en la que también ha acabado Simón Pérez, el economista y streamer que ha caído en una espiral salvaje. Kick tiene público y da dinero a cambio de sufrimiento. ¿De verdad que nadie puede pararlo?