PODRÍA empezar este Jai Alai alegando que estamos en puertas del 8 de marzo, Día internacional de la Mujer, para argumentar lo intolerable de que la presidenta de Nafarroa, María Chivite, fuera insultada ayer por un grupo de agricultores. Pero no. Da igual en qué día, semana o mes del año estemos. Las mujeres, caso que nos ocupa, no tenemos por qué aguantar insultos machistas de ningún tipo ocupemos el cargo que ocupemos. Da igual. Que haya quien no se quiera dar por enterado es cosa suya. El resto debemos alzar la voz para exigir respeto para todas las personas independientemente de su condición.