N anatema de la transición española está siendo releído. La Ley de Amnistía que pretendía vaciar las cárceles de la transición de los presos políticos del franquismo acabó blanqueando la impunidad de la dictadura. Penalmente, la posibilidad de juzgar los crímenes de aquella estructura de poder se queda sin culpables a los que acusar, por razón de edad. Pero queda el resarcimiento por vía de la verdad y la reparación pública. Y también porque el modelo nacional, el proyecto político del franquismo, vive y se reivindica hoy en las instituciones. ¿Les suena el argumento?