Nuevamente a Bilbao le han concedido un premio; esta vez se refiere al honor de ser elegida la Mejor Ciudad de Europa; anteriormente le dieron el título de mejor alcalde del mundo, a Iñaki Azkuna, alcalde que fue de Bilbao y que por desgracia ya no se encuentra entre nosotros.
Estos premios, no se reparten en ninguna tómbola y se conceden con el máximo rigor y optando el tribunal que los elige, entre varias ciudades de renombre internacional.
Aquí, el Ayuntamiento de Bilbao tiene la mayor culpa de que se le otorguen estos laureles, ya que desde que fue restablecida la democracia en este mi bendito país después de 40 años de dictadura y una guerra civil, tenemos un Ayuntamiento que saber estar y hacer agradable la vida entre los bilbainos.
Lo hacemos sin endeudarnos, tenemos balances positivos, sin créditos de ningún tipo y sin dinero negro en paraísos fiscales, ni cuentas opacas, ni contabilidades con fondos de reserva en Panamá u otros estados de los que tanto el Sr. Rajoy, el Sr. Bárcenas y una gran mayoría de su partido político están al día.
Tenemos que seguir mejorando nuestra calidad de vida y no olvidarnos de las personas que lo están pasando mal; debemos crear riqueza y sobre todo empleo entre la gente que más lo necesita.
¿Qué quedan muchas cosas por hacer? Ya lo sabemos; pero el tiempo volverá nuevamente a ser el testigo del buen hacer de un alcalde de Bilbao, ilusionado con su ciudad, sus habitantes y sus proyectos.