El 14 de octubre, DEIA publicó un artículo sobre el sorteo de viviendas celebrado el pasado día 7 en Abadiño. No quiero pensar que el objetivo de DEIA es tratar de crear dudas sobre el Gobierno vasco o sobre el Ayuntamiento de Abadiño por estar gobernado por un grupo independiente. Pero, lamentablemente, leyendo el artículo se puede deducir que, cuanto menos, hay falta de profesionalidad.

Si de algo estoy convencido es de que los reporteros que cubren los sorteos conocen la metodología. Y los de DEIA, también.

Al término del sorteo, una persona levantó la mano y se le invitó a acercarse a la tribuna a exponer sus dudas. Dudas que se le aclararon. Posteriormente, el alcalde por teléfono ratificó a esta persona la metodología del sorteo y quedó satisfecha con la explicación, pero enfadada porque no le había tocado. Algo, por otro lado, natural.

Lo que ya no alcanzo a entender es que DEIA, sabedor su reportero de la metodología del sorteo, saque una columna diciendo que Vecinos de Abadiño critican el último sorteo. Lo cierto es que el reportero que cubrió el acto no es el que firma la columna, por lo tanto, tengo que pensar que hay una intención oculta en la publicación de esta noticia desde el momento que no se contrasta y se publica algo absolutamente incierto. ¿Será que están próximas las elecciones?

Para que aprendan la metodología yo se lo explico: un voluntario del público pulsa un botón de un ordenador donde sale un número; en el caso que nos ocupa, salió el 134.

Posteriormente, la misma persona saca de una bolsita una bola con un numero en este caso fue el 3. Se suma el 134+3= 137. Este fue el primer número premiado. A continuación, a este número se le suma otra vez el 3 y nos da el 140, y así sucesivamente hasta sortear las 69 viviendas.

El error de la persona vino porque pensó que los números en vez de sumar de tres en tres había que sacarlos correlativos.

En fin, espero que la publicación de estas líneas sirva para aclarar el malentendido y para que DEIA y sus lectores comprendan la metodología de los sorteos de vivienda del Gobierno vasco.