El grupo chií libanés Hizbulá ha reivindicado este domingo un total de 12 ataques contra el norte de Israel en una nueva jornada de fuego cruzado y enfrentamientos más intensos en la frontera libanesa-israelí.

En una serie de comunicados, Hizbulá se ha atribuido la autoría de varios lanzamientos de cohetes contra diferentes posiciones del Ejército israelí, el primero de ellos por la mañana contra la localidad de Meron en respuesta a los ataques israelíes contra las aldeas del sur del Líbano que provocaron la muerte de una familia en Khirbet Salam.

Posteriormente, el grupo libanés ha efectuado otros dos ataques: uno aéreo con dos drones contra posiciones de artillería en la localidad de Arar y otro con misiles contra una agrupación de soldados israelíes al este del sitio de Birkat Risha.

En el transcurso de la jornada, Hizbulá ha intensificado su acción y ha atacado "con armas apropiadas", que no ha especificado, el sitio de Ramia, un vehículo militar israelí en el sitio de Al Malikiyah y un "equipo de espionaje" en las granjas libanesas ocupadas de Cheba.

En las últimas horas

Durante la tarde, los ataques con misiles han sido contra el sitio de Al Rahib y los soldados israelíes desplegados en sus alrededores, seguido de otra operación contra el cuartel de Maale Golán y los emplazamientos de Ramtha y Al Samaqa, en las colinas libanesas ocupadas de Kfar Shuba.

Según los comunicados, Hizbulá ha perdido hoy a tres miembros, que han caído como consecuencia del fuego lanzado por el Ejército de Israel contra posiciones de la organización en el sur libanés.

Las partes están enzarzadas en intenso fuego cruzado desde el pasado 8 de octubre, un día después del estallido de la guerra en la Franja de Gaza. A mencionar que estos enfrentamientos, los peores desde la guerra librada por ambos en 2006, han ido ganando intensidad con el paso de los meses y se han recrudecido con especial fuerza en las últimas semanas.

Esta semana, el mediador estadounidense Amos Hochstein se ha reunido con altos cargos libaneses en Beirut y posteriormente ha viajado a Israel para tratar de encontrar una solución diplomática a la crisis, sin que por el momento se hayan anunciado avances en esta tarea.