El dirigente opositor ruso Alexei Navalni ha comparecido este miércoles por primera vez ante un tribunal desde su traslado a una remota cárcel de la región de Yamalia-Nenetsia, en el Ártico, después de que durante unas tres semanas estuviese en paradero desconocido.
La portavoz de Navalni, Kira Yarmish, ha compartido en redes sociales una imagen de Navalni, que ha comparecido de forma telemática desde la cárcel donde se encuentra ahora recluido, en Jarp. Fue precisamente la ausencia de Navalni en este tipo de vistas la que llevó a su entorno a dar la voz de alarma y a advertir de un traslado que las autoridades evitaron confirmar en un principio.
Ya desde su actual destino, el político opositor, condenado a 19 años de cárcel por actividades supuestamente extremistas, había denunciado que los responsables de la prisión le habían puesto en aislamiento. Según Yarmish, ha pasado siete días en una celda de castigo.
El entorno de Navalni también ha comenzado a anunciar una serie de movilizaciones para el día 21 de enero, coincidiendo con el tercer aniversario de su retorno a Rusia, tras ser atendido en Alemania de un grave envenenamiento que casi le cuesta la vida. Uno de sus principales asesores, Leonid Volkov, ha difundido en Telegram estas convocatorias, que aspira a que se repliquen en varios países.
La lista no incluye Rusia, un país en el que las autoridades han aumentado las medidas de represión y censura especialmente a raíz del inicio de la ofensiva militar sobre la vecina Ucrania.
