El primer ministro británico, Rishi Sunak, pidió ayer a los partidos norirlandeses que dejen atrás sus diferencias y negocien la formación de un Gobierno autónomo de poder compartido, que permanece suspendido desde hace un año por el veto unionista al Protocolo del Brexit para la región. Un día después de anunciar el llamado Acuerdo marco de Windsor, Sunak viajó ayer a Irlanda del Norte para presentar sobre el terreno sus ventajas y persuadir al DUP para que vuelva a un Ejecutivo autónomo liderado por el Sinn Féin, en el que también entrarían el Partido Alianza, el Partido Unionista del Ulster (UUP) y el Partido Socialdemócrata y Laborista (SDLP).

“Eso es lo que os merecéis”, aseguró Sunak en una comparecencia ante trabajadores de una fábrica cercana a Belfast, adonde viajó ayer tras cerrar la víspera un acuerdo con la Unión Europea (UE) para mejorar ese instrumento que regula el comercio en Irlanda del Norte tras la salida del Reino Unido del bloque comunitario.

Sunak reconoció que las “preocupaciones” que tenía la comunidad unionista sobre el impacto del protocolo en la región “eran válidas”, pero insistió en que el nuevo pacto ha “corregido” los problemas que ha causado. “Este marco es un acuerdo fantástico que aborda todas las cosas que preocupan a la ciudadanía. Ahora confío en que así lo entenderán y que tratarán de encontrar una solución conjunta”, señaló el premier en referencia al DUP, aunque sin nombrarlo.

Preguntado por el hartazgo de la población por la prolongada suspensión de las instituciones de gobierno norirlandesas y la inactividad de sus políticos, Sunak recordó que Londres les ha rebajado el salario en un 27% y reiteró que “queremos que hagan su trabajo”.

Emplazamiento al DUP

En este contexto, las principales formaciones norirlandesas también pidieron ayer al Partido Democrático Unionista (DUP) que se pronuncie pronto sobre el nuevo acuerdo de reforma del Protocolo del Brexit para restaurar cuanto antes el Gobierno de Belfast de poder compartido, que permanece suspendido desde hace un año.

“El acuerdo está hecho. Mi mensaje clave es hay que mantener este impulso. La prioridad ahora debe ser la restauración (del Gobierno) sin demora”, afirmó la vicepresidenta del Sinn Féin, la nacionalista Michelle O’Neill, tras una conversación telefónica con Sunak.

El líder del DUP, Jeffrey Donaldson, que ayer estaba en Londres, ya advirtió de que se tomarán “su tiempo” para decidir si apoyan el acuerdo del Gobierno británico y la UE sobre la provincia, el cual someterán al escrutinio de abogados.

La formación unionista, segunda fuerza regional, quiere analizar en detalle el contenido del texto de Windsor y decidir después si levanta su boicot sobre el protocolo reformado, un instrumento que ha considerado hasta ahora que pone en peligro la relación de Irlanda del Norte con el resto del Reino Unido.

“La clave ahora para nosotros es que necesitamos una decisión del DUP y que tenemos que volver al trabajo”, declaró Naomi Long, líder del multiconfesional Partido Alianza, tercera fuerza regional.

Por su parte, el también probritánico UUP, cuarta formación, calificó de positivo el acuerdo alcanzado entre Londres y Bruselas, y reconoció que Sunak “está trabajando duro” para “venderlo”. “Nosotros lo examinaremos cuidadosamente. Pero creo que quien diga que esto llevará semanas o meses está mintiendo”, indicó el líder del UUP, Dough Beattie, quien opinó que se puede estudiar el pacto de reforma en “una semana o dos”.