Porsche 911 Carrera 4S, 480 caballos y tracción total
La casa de Stuttgart amplía la gama de su modelo más emblemático añadiendo una nueva configuración motriz, disponible en formatos Coupé, Cabriolet y Targa desde 188.000 euros
Dos mil personas se han regalado un Porsche en lo que va de año. Dos de cada tres han optado bien por el Cayenne (676) o bien por el Macan (553), que se convierten así en los principales argumentos de la selecta firma. El 911, a menudo considerado la más genuina creación de la casa alemana, atrae a 358 incondicionales. Ahora, la incorporación a su repertorio de una nueva declinación Carrera 4S, con cuatro ruedas motrices y 480 CV, ensancha un poco los limitados horizontes comerciales de este sucesor del mito nacido en 1963, que desde 1964 ostenta la ya legendaria numeración 911.
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La variante recién incorporada al catálogo viene a ocupar una posición intermedia en la gama. Por debajo quedan los Carrera (394 CV) y por encima los GTS (541 CV), los GT3 (de 510 a 541 CV) y el Turbo (650 CV). Su precio, que arranca en 188.000 euros y culmina por encima de 206.000 dependiendo del formato elegido, también ocupa una franja central de la tarifa Porsche.
El Carrera 4S viste los tres atuendos disponibles en el modelo: Coupé, Cabriolet y Targa. Su aparición multiplica por dos las posibilidades de adquirir un 911 con tracción integral. Esta es una solución cada vez más solicitada por la clientela, entendida y amante de la deportividad, pero que valora la contribución de las cuatro ruedas motrices a la hora de ponerse al volante. Al fin y al cabo, es un sistema que aporta seguridad y precisión de movimientos, cualidades decisivas tanto en vías rápidas como en trazados sinuosos, en especial cuando las condiciones climatológicas se complican.
Las nuevas versiones 4S comparten con las demás 4x4 del 911 una dinámica de conducción concebida para priorizar el empuje del eje trasero. Si las circunstancias lo requieren, el sistema Porsche Traction Management incrementa el par motor en el eje delantero con el fin de garantizar un buen gobierno de la máquina al aumentar la capacidad de tracción y la estabilidad. El sistema de embrague delantero encargado de repartir la potencia entre los dos ejes va refrigerado por agua y se controla electromecánicamente. Además, en el 4S se ha reajustado ligeramente la relación de transmisión.
El sistema de propulsión presenta algunas mejoras respecto al del Carrera S. El motor bóxer biturbo de seis cilindros y 3.0 litros suministra 480 CV, 30 más que en la entrega precedente del modelo. De ese incremento de rendimiento es parcialmente responsable un nuevo intercooler, optimizado siguiendo el patrón del que monta el 911 Turbo. El propulsor va acoplado a una transmisión de doble embrague con ocho relaciones, asociación que garantiza vertiginosas reacciones. El 911 Carrera 4S Coupé es capaz de progresar de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos (con el paquete Sport Chrono) y, en el escenario propicio, registra una velocidad máxima de 308 km/h.
Porsche ha enriquecido el equipamiento de esta variante, que suma recursos tecnológicos y complementos más funcionales o de imagen. Ahora incluye llantas Carrera S de 20 y 21 pulgadas con un diseño actualizado, sistema Porsche Torque Vectoring Plus, escape deportivo con el sonido distintivo del 911, así como el sistema de frenos del GTS, provisto de pinzas rojas y discos de 408 milímetros delante y 380 milímetros detrás. La provisión de serie se completa con el paquete de cuero, faros Matrix LED, carga inalámbrica de teléfono, retrovisores exteriores con plegado eléctrico e iluminación del marco, paquete Light Design, espejos interiores y exteriores con oscurecimiento automático, sensor de lluvia integrado y advertencia de cambio de carril.
La versión Targa del 911 Carrera 4S cuenta con ruedas traseras direccionales de serie. Esta variante formal y la Cabriolet van provistas de asientos traseros. La Coupé, en cambio, sale de fábrica como biplaza, aunque en el momento de la compra se pueden solicitar las dos butacas traseras sin coste adicional.