El antiguo Hospital Militar Francés, llamado Hospital Maison D’Assistance Fran-çaise inaugurado en 1917 y entregado al Gobierno vasco el 26 de noviembre de 1937, situado en la avenida Ascaso, pasó a ser el Hospital de Euzkadi en Barcelona. Hasta ese momento, este hospital estuvo controlado por los Servicios Sanitarios de la Unión General de Trabajadores (UGT).
Sito en un inmueble preparado anteriormente para la actividad sanitaria, ya que allí se instalaron los servicios hospitalarios de la colonia francesa, fue cedido al Gobierno vasco por el Consulado General de Francia. Comenzó a funcionar con un centenar de camas. La importancia que alcanzó este hospital fue considerable como lo demuestran las doscientas camas que llegó a tener en el Departamento de Obstetricia y Ginecología. Esta atención pediátrica se completaba con un equipo multidisciplinar integrado por enfermeras, asistentes sociales, médicos y maestras. En el centro fueron acogidos, además de los niños enfermos, aquellos otros que no estándolo necesitaban de una sobrealimentación. El plan de sobrealimentación consistió en una estancia hospitalaria de un tiempo medio que osciló entre 15 y 20 días. En su primer trimestre de andadura se registraron 127 entradas, 2.647 consultas, 17 operaciones, 410 reconocimientos y 426 inyecciones.
A la inauguración, asistieron en representación del Consulado General de Francia, el cónsul M. Boureun, quien hizo entrega del edificio, dependencias e instalaciones; y el agregado Robert Vuncent. Asimismo, acudieron el consejero de Hacienda del Gobierno vasco en funciones de presidente del mismo, Eliodoro de la Torre; Manuel de Irujo, ministro de Justicia de la República, acompañado de su secretario Antonio Horna; Dardalió, en representación del consejero de Gobernación y Asistencia Social de la Generalidad, y, en representación del Gobierno vasco y de sus diferentes departamentos, Taramona, Basterra, Garmendia, Areitioaurtena, Gómez Beltrán, Sasiain, Ramón Aldasoro, Aretxabaleta, Anabitarte, Liceaga, etc.
Eliodoro de la Torre, recordó con agradecimiento las atenciones tenidas en Francia con los refugiados vascos y la oferta de este hospital para los enfermos o heridos, una obra de fraternidad que enaltecía los sentimientos humanitarios de Francia.
El Hospital de Euzkadi funcionó bajo la dirección del doctor José Indalecio Cincunegui Arruti, asistido por el doctor Imaz, del Hospital General. El hospital se encontraba habilitado para todas las especialidades médicas y estaba especializado en operaciones quirúrgicas y maternidad. El personal de servicio era vasco en su inmensa mayoría, figurando entre él quince enfermeras profesionales, entre ellas muchas de la Cruz Roja del País Vasco, que se desplazaron a Barcelona.
Con anterioridad, el doctor Cincunegui había estado trabajando con sus compañeros, los doctores José Luis Aransolo Bilbao, Preiro, Miguel Iparraguirre, Luis López Abadía y Musatadi en el Hospital de St. Christau, asistiendo también a los pacientes que se encontraban en Cambó donde se había instalado un Sanatorio Antituberculoso llamado Osasuna.
El centro también acogió a niños enfermos, además de los que necesitaban alimentarse por estar desnutridos a causa de la guerra y estaban a cargo de sus cuidados las enfermeras y maestras. El Hospital de Euzkadi estuvo activo hasta diciembre de 1938, poco antes de la caída de Barcelona, el 26 de enero de 1939.
Antecedentes del Hospital
El antiguo Hospital Militar Francés, llamado Hospital Maison D’Assistance Française, fue inaugurado en 1917 y en 1937 lo cedieron como Hospital de Euzkadi, en la Plaza de la Fuente Castellana de Barcelona.
El edificio tenía una fachada de estuco de piedra y ladrillo. Además contaba con un cuerpo central con un llamativo tejado inclinado hacia los cuatro lados que se despedía sobre un cuerpo alargado con semisótano y planta baja, ligeramente despejada sobre el nivel de la calle. Una valla enrejada, que aún hoy se conserva parcialmente junto con la de la entrada, separaba el terreno de la calle delante de la fachada principal.
La primera piedra del edificio se puso el 28 de mayo de 1916 en un acto protocolario al que asistieron el cónsul francés en Barcelona y Lucien Poincaré, hermano del presidente de la República Francesa. El hospital comenzó a funcionar al año siguiente en 1917.
En 1937, en plena Guerra Civil española, el hospital fue cedido por el gobierno francés al vasco después de haber estado un tiempo bajo el control sindical de la Unión General de Trabajadores (UGT), y rebautizándolo como Hospital de Euzkadi. Según consta en la edición de La Vanguardia del viernes 17 de febrero de 1939, el Ayuntamiento de Barcelona se hizo cargo de todos los enfermos y soldados heridos que fueron abandonados a su suerte, cuando el personal de asistencia sanitaria del Hospital de Euzkadi pasó la frontera para refugiarse en Francia.
La historia de este edificio continuó con el inicio del franquismo, ya sin su función asistencial y con la reconversión posterior del hospital acondicionado como la Escuela de Formación Profesional José Antonio Girón de Velasco.

Dos edificios que recuerdan en Barcelona el exilio vasco durante la Guerra Civil: el Hospital de Euzkadi y la Sede del Gobierno vasco en el exilio.
Etapa de la Guerra Civil Española 1936-1939
Durante la Guerra Civil española el edificio tuvo varias funciones antes de convertirse en el Hospital de Euzkadi (Cruz Roja, servicios de hematología dependientes de la UGT) hasta que fue cedido por el consulado francés al Gobierno de Euzkadi en el exilio para servir como hospital destinado a los refugiados vascos. El edificio se encontraba a pocos metros del palacete Pla i Ravetllat, donde se estableció la sede del Gobierno vasco en el exilio, en 1937.
Según algunas fuentes, en su capilla se pudieron realizar bautizos católicos durante la Guerra Civil, mientras que era imposible bautizar legalmente en el resto de la ciudad de Barcelona debido a la presión que la Confederación Nacional del Trabajo CNT ejercía sobre los clérigos catalanes.
El Gobierno de Euzkadi en el exilio, presidido por José Antonio Agirre Lekube, tenía su sede en la misma avenida Mare de Déu de Montserrat, a pocos metros del Hospital de Euzkadi. Se trataba de un palacete que sigue existiendo en la actualidad y que cuenta con vistas soberbias de la ciudad de Barcelona.
En un texto de la época, extraído del blog Memòria del Barris puede leerse lo siguiente sobre uno de los miembros del Gobierno vasco en el exilio, el socialista Manuel de Irujo, que posiblemente consiguiera la cesión del edificio por parte de su propietario, el doctor Ramón Plá Armengol, miembro destacado del partido socialista en Catalunya.
“Mientras permaneció en Barcelona, Irujo estableció su domicilio particular en la finca que arrendó en las afueras de la ciudad a Ramón Plá Armengol y Nuria Plá Montseny; la casa-torre número 114 de la avenida de Montserrat estaba abierta también a todas las personas afectas a las instituciones vascas”.
La actividad sanitaria del Gobierno Vasco en el exilio
La caída del frente del norte supuso la desaparición del espacio territorial donde el Gobierno vasco ejerció su autoridad. No obstante, el Gobierno vasco continuó sus actividades asistenciales. Primero, por un corto período en Santander, luego en Cataluña, para terminar en su exilio en Francia. A pesar de esta circunstancia, continuó prestando ayuda sanitaria a su población desplazada.
Al frente del Departamento de Sanidad fue nombrado por el Lehendakari Aguirre, el doctor Alfredo Espinosa y Oribe el 7 de octubre de 1936. Fue presidente de la Unión Republicana de Vizcaya cuando triunfó el Frente Popular y fue, a partir de agosto de 1936, comisario de Comunicaciones en la Junta de Defensa de Vizcaya. Hay que decir que el doctor Alfredo Espinosa, consejero de Sanidad del Gobierno vasco, fue fusilado en junio de 1937 por el ejército sublevado franquista, cuando gestionaba la evacuación de los niños vascos al extranjero. Las funciones de consejero de Sanidad fueron asumidas por el consejero de Hacienda, Eliodoro de la Torre, quien continuó la obra iniciada por el doctor Espinosa.
Asentados los primeros órganos de la autoridad sanitaria vasca se impusieron una serie de actuaciones asistenciales que podemos resumir, siguiendo la cronología de la legislación publicada en el Diario Oficial del País Vasco del momento, en: la creación de la Cruz Roja de Euskadi (del País Vasco), regulación de la actividad de los médicos y enfermeras, Farmacia y Odontología, Alimentación y cuidado pediátrico, el Instituto Técnico de Comprobación, cuidado maternal y la Facultad de Medicina. El 19 de noviembre de 1936 se crea La Cruz Roja del País Vasco, como lo corrobora el Diario Oficial del País Vasco número 44 del 21 de noviembre de 1936, en sus páginas 352 y 353.
Con respecto al cuidado pediátrico y, sobre todo, en relación con las frecuentes enfermedades eruptivas de los niños y para evitar los contagios en las aglomeraciones humanas, sobre todo en los refugios, se dispuso que los médicos que asistían a los niños afectos de enfermedades quedaban obligados a practicar en los mismos instilaciones en nariz, oídos y ojos de una solución glicerinada de un compuesto coloidal de plata (argirol, colargol, protargol) al 5%, dos o tres veces al día, y una embrocación de alcoholuro de eucaliptus, una o dos veces al día, en todo el cuerpo. En la casa de salud infantil de Zaratamo se destinaron 60 camas para niños afectados de raquitismo, estado de salud precario o curas en régimen especial.
Orden de 12 de abril de 1937
El Hospital Civil de Bilbao organizó cursos de enfermeras para hacer frente a la demanda sanitaria tanto de la población civil como de la militarizada.
El doctor Gonzalo Aranguren evacuó a cerca de 1.000 soldados heridos de guerra que se encontraban en Santander, al Hospital de La Roseraie situado en Ilbarrhz, cercano a Bidart, convirtiéndose fundamentalmente en quirúrgico, ya que el 80% de los soldados heridos desplazados precisaban este tipo de atención. El equipo quirúrgico estuvo constituido por los doctores Gonzalo Aranguren Sabas, Ignacio Garaigorta San Vicente y Martín Ugalde. Así, el doctor Ángel Aguirreche Goicoechea, director del Departamento de Maternidad, computó más de cincuenta intervenciones. La asistencia sanitaria fue prestada, prácticamente, hasta 1940, inicio de la invasión alemana de Europa.