El popular comunicador Pablo Motos ha confesado en el pódcast "Tengo un plan" cuál es su rutina matinal a la hora de desayunar, un hábito que, según él, le ayuda a rendir tanto en lo personal como en lo profesional. “Yo desayuno siempre bayas de goji, nueces y una tortilla grande”, explicó al inicio de la charla, detallando que también suele consumir una tortilla francesa o una de claras, en función del entrenamiento que le espere ese día.
Motos recalcó que en su dieta no hay lugar para los clásicos de muchos desayunos. “Nada de carbohidrato, ni de tostada”, señaló con firmeza, explicando que su decisión se basa en una convicción personal: “Prefiero que mi cuerpo se acostumbre a usar las grasas como combustible y la proteína”.
Con esta elección, el presentador muestra su apuesta por un desayuno proteico y bajo en hidratos, una tendencia cada vez más extendida entre deportistas y aficionados al fitness que buscan mantener la energía estable y sin picos durante la mañana.
¿Qué son las bayas de goji?
Las bayas de goji son unos pequeños frutos rojos originarios de Asia, especialmente cultivados en China y Mongolia, que en los últimos años se han popularizado en todo el mundo como un alimento ligado a la salud y el bienestar. Se consumen tanto frescas como deshidratadas y destacan por su sabor ligeramente dulce y ácido.
Se les atribuyen propiedades antioxidantes gracias a su alto contenido en vitamina C, betacarotenos y polifenoles, además de aportar proteínas, fibra, hierro y zinc. Aunque se han promocionado como “superalimento”, los expertos señalan que sus beneficios son similares a los de otros frutos rojos como los arándanos o las frambuesas.
¿Cuál es el desayuno ideal?
Un desayuno ideal no se define por una única receta, sino por la combinación equilibrada de nutrientes que aporten energía sostenida y bienestar a lo largo de la mañana. Los expertos coinciden en que debería incluir una fuente de hidratos de carbono complejos, como pan integral, avena o frutas, que proporcionan energía de liberación lenta y ayudan a mantener la saciedad. También es fundamental añadir proteínas de calidad, presentes en huevos, yogures, quesos frescos o frutos secos, que favorecen la reparación y el mantenimiento de los músculos.
Las grasas saludables, como las que aportan el aguacate, las semillas o el aceite de oliva, contribuyen a la salud cardiovascular y potencian la sensación de saciedad. Tampoco pueden faltar las vitaminas, minerales y antioxidantes, que llegan de la mano de frutas frescas y, si se quiere, de verduras incorporadas en batidos o tostadas.
Por último, una correcta hidratación con agua, infusiones o café moderado completa un desayuno que no solo aporta calorías, sino también equilibrio nutricional y energía de calidad para empezar el día.