Bitsa, nuevo gastrobar de Bilbao con vocación cultural junto a la ría

Entre las propuestas hosteleras de Bilbao que buscan algo “diferente” se ha hecho un hueco Bitsa, un gastrobar con vocación cultural, como se desprende de la intención con la que ha abierto las puertas su fundadora, precisamente, una joven pintora que hizo en este local antaño su primera exposición.

La oferta gastronómica de Bitsa consiste en cocina en frío, recogida en una carta con 12 platos a lo que suma una gama de bocadillos -hasta nueve diferentes-, como el de bonito con alegría y piparra o con anchoa... Lo que sí calientan es el pan. En suma, todo para un picoteo a gusto. Incluso tienen en cuenta al público vegano, con un bocadillo y ensaladas, que pueden tomar con kombucha.

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Todo primando la selección de producto, desde el jamón, cecina, lomo, anchoas y boquerones hasta el bonito del norte. Y apostando por el género de cercanía, incluso el pan es de un obrador próximo.

Tardeo en Bilbao

Proponen así un tardeo desenfadado, con opciones para compartir, de martes a viernes, a partir de las 17.00 horas, y el fin de semana también al mediodía, a partir de las 12.00 horas.

Para acompañar al picoteo ofrecen cinco referencias de vino por copas y una selección por botellas, de distintas D.O. Y cervezas, con tres cañeros, una IPA, una sin gluten, sin alcohol y próximamente alguna referencia artesana. Curiosamente, el propio nombre del local -significa espuma en euskera-, evoca a esta bebida tan dispuesta para el picoteo.

Exposiciones en Bitsa

En el interior, Bitsa tiene capacidad para 40 personas sentadas y un área cultural que da oportunidad de exponer sus obras a artistas locales, rotando cada 2/3 meses las exposiciones, ya sean de pintura, fotografía o hasta diseños de camisetas, por ejemplo, hechos “con arte”. Allí, mientras apura su consumición, el cliente puede adquirir las obras, cuyos beneficios van a parar íntegramente al artista.

En este sentido, de cara a septiembre, Bitsa prepara una agenda cultural que contempla eventos como teatro de improvisación, música en vivo, presentaciones de libros, coworking... Una muestra de la citada vocación cultural con la que nace.

También brinda una pequeña terraza junto a la ría, que prevén ampliar en breve.