Rúben Amorim, técnico del Manchester United, compareció en la tarde de ayer en San Mamés poco más de 24 horas antes de que su equipo dispute la final de la Europa League frente al Tottenham. Con unos diez minutos de retraso con respecto al horario previsto por la UEFA, las 19.30 horas, el entrenador portugués respondió a un puñado de preguntas, no demasiadas, sobre el choque que medirá a su equipo con el conjunto londinense. Tal y como sucediera en Carrington, el lugar de entrenamiento de los diablos rojos hace unas pocas semanas, en la previa del partido de vuelta de las semifinales continentales ante el Athletic, Amorim fue cuestionado en varias ocasiones por su futuro, circunstancia que sorprende con la gran final de la Europa League tan cercana en el tiempo.

El entrenador del Manchester United salió como buenamente pudo de dichas preguntas. “No es el momento de hablar ahora de mi futuro”, se excusó en la segunda intervención. “Va a terminar la temporada y habría que ver de manera distinta todo si se gana un título europeo, que es importante”.

En este sentido, agregó que conquistar la Europa League les puede “ayudar de cara al futuro”, aunque matizó inmediatamente que “no se va a resolver todo ganando un trofeo”, en alusión a los muchos problemas que se ha encontrado desde su llegada al banquillo del conjunto inglés el pasado mes de noviembre. Un fichaje que se produjo con la la temporada empezada y después de que desembolsaran más de diez millones de euros al Sporting de Portugal para hacerse con sus servicios.

Insistido sobre si dejará el banquillo del United, asumió la presión como algo normal, relacionado con su cargo. “No es el caso que me vaya a ir. Llegué desde un club que para mantener jugadores había que jugar la Champions. Aquí es distinto, esta es una marca enorme. Siempre juego por más que mí mismo. Entreno para los jugadores, el cuerpo técnico y todos los aficionados”.

Sobre la final, Amorim lanzó un mensaje de optimismo a sus futbolistas: “Tenemos que estar ilusionados y con confianza. Sabemos los problemas que tenemos, sabemos lo que tenemos que cambiar, las cosas a mejorar con los fichajes y hay muchas cosas que tenemos que hacer para llevar a este equipo a la cúspide. Mañana –por hoy– va a ser importante para nuestro equipo. Si ganamos lanzaremos un mensaje muy importante a todos”.

Por último, preguntado por la forma en la que el Tottenham ha preparado la final, dando más descanso a sus futbolistas importantes, dijo no saber “cuál es el contexto” de su rival. “Nosotros hemos tenido tiempo para preparar la final y la mejor forma es que los jugadores hayan estado jugando”.

Maguire

Además de Amorim, también tomó la palabra Harry Maguire, uno de los capitanes del equipo, quien aseguró que la temporada del equipo por momentos ha sido “frustrante”, pero que en Europa las cosas han sido “distintas”. “Ahora tenemos una final, es una ocasión especial, nos hemos estado preparando y será distinto a todo”.