Buenas noticias en clave del Barakaldo. El centrocampista Unai Naveira, que tuvo que abandonar el último partido de su equipo ante el Unionistas de Salamanca pasada la media hora en camilla tras sufrir un lance fortuito que dañó su rodilla, no padece rotura alguna cuando en un principio la lesión ofrecía indicios de gravedad y la dolencia se ha quedado en una fuerte contusión, según ha informado esta misma mañana el club de Ezkerraldea, por lo que el regreso del jugador de Sestao está cercano, si bien en el comunicado no se menciona plazos.
Las pruebas médicas a las que ha sido sometido Naveira, que cumple su primer curso en el Barakaldo tras ejercer la pasada campaña en el San Fernando gaditano, descartan una lesión de máxima importancia, pese a que Imanol de la Sota, el técnico de los vizcainos, manifestó tras la conclusión del enfrentamiento con Unionistas que el percance del centrocampista “tiene pinta de algo feo”, una sensación que hacía temer por la posibilidad de que el futbolista se perdiera lo que resta de temporada, algo que afortunadamente se desactiva, lo que alivia al colectivo gualdinegro, que mañana rinde visita al Zamora en un partido clave para mantener su plaza de ‘play-off’ dentro del grupo I de Primera RFEF.
Las noticias positivas se extienden también al caso de Adrián Revilla, que solo pudo jugar un puñado de minutos el pasado día 19 en la visita del Barakaldo al Arenteiro en encuentro pendiente tras ser suspendido un mes atrás por el temporal que azotó a Galicia. El delantero, fichado del Orihuela, sufrió una lesión muscular en los isquiotibiales y su plazo de baja se estimaba en poco más de mes, pero los resultados médicos rebajan la relevancia de la lesión y podría volver a la convocatoria de cara a la próxima jornada, con el duelo en Lasesarre frente al Lugo.