Giménez culmina la remontada del Atlético de Madrid ante el Leipzig

Leipzig 1

ATLÉTICO DE MADRID Jan Oblak, Marcos Llorente, Robin Le Normand, José María Giménez, Reinildo Mandava, Rodrigo Riquelme (Lino Min. 63; Ángel Correa (Nahuel Molina Min. 66) , Koke Resurrección, Rodrigo de Paul (Gallagher Min. 63), Antoine Griezmann (Witsel Min. 91); y Julián Alvarez (Sorloth Min. 63).

LEIPZIG Peter Gulacsi; Benjamin Henrichs (Geertruida Min. 70), Willi Orban, Castello Lukeba, David Raum; Antonio Nusa (Baumgarnet Min. 46), Amadour Haidara, Arthur Vermeeren (Seiwald Min. 60), Xavi Simons (Elmas Min. 84); Benjamin Sesko (Poulsen Min. 70); y Lois Openda.

Goles 0-1 Min. 4: Sesko. 1-1 Min. 28: Griezmann. 2-1 Min. 90: Giménez.

Árbitro Ivan Kruliak (Eslovaquia). Amarillas a Le Normand (Min. 10), Lukeba (Min. 39), Baumgarnet (Min. 48) y De Paul (Min. 60)

Estadio Metropolitano. 57.856 espectadores.

Irrumpió José María Giménez cuando el partido se encaminaba al empate y con la cabeza, casi en el penúltimo suspiro, tras un pase de Antoine Griezmann, seguramente el mejor del Atlético de Madrid y autor del primer tanto, metió el balón en la jaula del Leipzig para dar a los suyos una victoria de orgullo por 2-1 en el debut en la Liga de campeones.

Había salido, sin embargo, el Atlético descolocado e impreciso al terreno de juego. Sobre todo Rodrigo de Paul, responsable del error que dio lugar al 0-1. Sólo se llevaban 4 minutos y el público se ubicaba aún en las localidades tras una tarde que tornó desapacible y lluviosa. De Paul perdió un balón en el semicírculo del área de Jan Oblak y de ello se aprovechó Benjamín Sesko para marcar.

Todo un jarro de agua fría inesperado que sorprendió a Simeone y envalentonó al Leipzig, que con orden atrás y balones al gigante Sesko (195 centímetros de altura), hizo sufrir al Atlético.

Pero según se fue entonando Correa fue apareciendo el Atlético. Primero Julián Alvarez, con un taconazo tras un saque de esquina, y después Griezmann, tras una bonita combinación con Riquelme y De Paul, pudieron empatar. También lo pudo hacer Correa, con un balón al palo, hasta que lo logró Antoine Griezmann. Desde muy cerca del punto de penalti enganchó un centro de Llorente desde la derecha. Era el minuto 28 y el Atlético estaba despertando. El Leipzig siguió parapetado detrás y fueron pasando los minutos. El empate parecía inevitable, pero surgió Giménez de repente en el minuto 90 para meterla en la red rival con la testa tras un pase perfecto de Griezmann. Gol, explosión en el estadio, victoria y tres puntos muy importantes para el Atlético en su gran reto un año más. La Champions es una obsesión, gritaba la afición.