El Gernika puso el pasado sábado fin a la racha de cuatro jornadas consecutivas sin ganar con su incontestable triunfo sobre el Valle de Egüés en Urbieta que relanza en el grupo II de Segunda RFEF a un conjunto foral que se ha movido con cierta intensidad en este mercado invernal. No en vano, sus primeras operaciones tuvieron lugar en fechas precedentes, cuando se conocieron las salidas del meta Gorka Magunazelaia, que pidió regresar a Asturias, donde se había afincado años atrás, y comprometerse con el Mosconia, equipo de la Regional Preferente astur, una marcha a la que se sumó también la del extremo Jorge Bengoetxea, que no tenía el rol que le gustaría y que ha recalado en el Ibiza Pitiusas, de Tercera RFEF. Ante ello, la dirección deportiva que lidera Edu Abad cerró primero la incorporación del delantero Aimar Peña, cedido por el Basconia, y posteriormente la del portero Gorka San Nikolas, del Vitoria.

Sin embargo, no son estas las únicas novedades en el Gernika que, a la espera de poder consumar el fichaje de Quicala Bari desde el Bilbao Athletic, ha cerrado la contratación del defensa Paul Álvarez (Hernani, 30 de marzo de 2000). El central procede de la Peña Deportiva de Ibiza, que compite en el grupo III de Segunda RFEF y donde no ha tenido el protagonismo que esperaba, por lo que regresa a Euskadi siete meses después de cerrar su etapa en el Arenas, en el que la campaña pasada ejerció un rol importante, ya que compareció en 29 encuentros oficiales, 27 de liga y dos de Copa, y en los que anotó tres goles. El Gernika no prevé ningún movimiento más, salvo la posible llegada de Quicala Bari, con el que abrió negociaciones semanas atrás. –