SESTAO RIVER: Puig, Etxeberria, Mateo, Mirapeix, Gaizka Martínez, Corbalán, Carbonell (Min. 74, Ibai Sanz), Álvaro Gete (Min. 81, Uriarte), Leandro, Guruzeta (Min. 81, Alayeto) y Aranzabe (Min. 74, Jon Cabo).

LUGO: Tabuaço, Carlos Julio (Min. 89, Castrín), Javi Vázquez, Gorka Pérez, Morgado, Sabit, Fuentes (Min. 78, Narro), Ojeda, Ledesma (Min. 89, Jorge González), Quintana y Antoñín (Min. 46, Antonetti).

Gol: 0-1: Min. 66; Ledesma.

Árbitro: Monterrubio Torres (Comité Aragonés). Mostró cartulinas amarillas a Morgado, Ojeda, Carlos Julio y Javi Vázquez, todos por el Lugo.

Incidencias: 1.200 espectadores en el campo de Las Llanas. 

El Lugo endosó una derrota inmerecida, otra más, al Sestao River en Las Llanas, en un encuentro en que el conjunto verdinegro perdonó lo imperdonable en la primera parte para luego, en la segunda, ir menguando ante un conjunto gallego al que le bastó con la pegada en una jugada al contraataque. El gol de Ledesma cayó como un jarro de agua fría sobre el público local y sobre los jugadores de Aitor Calle, para quienes obrar la remontada ya supuso un auténtico Everest, y que vivieron una película ya vista hace dos semanas en la derrota ante el Fuenlabrada. Garra, coraje, ocasiones, poco acierto de cara al gol, tanto visitante a las primeras de cambio y derrota por la mínima. Un tropiezo que impide afrontar con algo de desahogo la semana copera ante el Celta.

Resultó increíble que la primera mitad se fuera al descanso con el empate inicial. El River tuvo un buen número de ocasiones para adelantarse e incluso para irse con una buena ventaja al descanso. Eso sí, costó entrar en el partido y el primero en avisar fue el Lugo. Tras un despeje de Mirapeix, Ojeda disparó desde la frontal sin peligro para Puig. Luego, los de Aitor Calle se fueron haciendo con el dominio, aunque tardaron en llegar las ocasiones. Después de un cabezazo de Álvaro Gete, casi sin ángulo, bien detenido por Trabanço, y una volea de Corbalán arriba tras centro de Mateo, llegó el carrusel de ocasiones verdinegras en que se convirtieron los veinte últimos minutos de la primera parte. Un peligroso centro de Carbonell desde la derecha, pisando área, no encontró rematador por muy poco. Otro centro del mismo jugador lo cabeceó Guruzeta, elevándose impecablemente, pero el esférico se estrelló en el larguero y después Aranzabe cabeceó el rechace para la intervención, con problemas, del meta visitante. 

Una cabalgada de Guruzeta acabó en apertura hacia Leandro, quien quizá un poco cerrado no tuvo acierto en el disparo. Otro centro, este de Aranzabe desde la izquierda, se paseó también sin rematador. Guruzeta, Leandro... se quedaron a centímetros del gol. Ya en los últimos compases antes del descanso, el Lugo reapareció con un disparo de Fuentes desde lejos que Puig envió a córner y con un disparo de Carlos Julio, en el rechace de dicho córner, que se encontró con la cepa del poste derecho.

Tras el descanso, Leandro cruzó un disparo desde el vértice del área que Trabanço tocó lo justo para desviar a córner. Pero poco a poco se vio que las cosas no serían como en la primera mitad. Tras una contra, pase de la muerte de Fuentes sobre Ojeda, que se trastabilló solo ante Puig y acabó resolviendo la zaga verdinegra. En el siguiente contragolpe de los de Pedro Munitis, balón desde la derecha y Ledesma cruzó ante Puig el que sería definitivo 0-1. Con ventaja en el marcador, los lucenses disputaron sus mejores minutos y Antonetti, peinando hacia atrás en un córner, estuvo cerca del segundo. 

El River ya apenas tuvo convicción para intentar la remontada. Lo más destacable llegó tras un córner pasado rematado por Mateo y el rechace del meta lo empujó Ibai Sanz a las redes, pero el colegiado anuló el tanto por fuera de juego. De ahí al final los locales mostraron su impotencia para evitar una derrota que, visto lo visto sobre el terreno, supuso nuevamente un excesivo castigo.