Portugalete2
San Pedro0
PORTUGALETE: Mediavilla, Axel, Cubería (Min. 77, Neira), Moya, Artabe, Ukerdi, Mato (Min. 53, Chopi), Arbeloa, Bonilla, Ousmane (Min. 17, Vicky) y Galder.
SAN PEDRO: Beldarrain, Aitor Santos, Jesús, Israel, Erik, Iker Santos (Min. 73, Olazabal), Ibon Gutiérrez, Urko, Bilbao, Ekaitz (Min. 68, Jonpe) y Jagoba (Min. 46, Ander).
Goles: 1-0: Min. 26; Artabe. 2-0: Min. 92; Arbeloa.
Árbitro: Azkuenaga Astirkiza. Amonestó a los locales Galder y Neira y al visitante Urko.
Incidencias: 500 espectadores en La Florida.
Portugalete - Si alguien que no presenció ayer el encuentro de La Florida piensa que fue un partido cómodo para el Portugalete, nada más lejos de la realidad. El San Pedro hizo méritos para vencer y, cuando menos, quizás por la candidez de sus jugadores en los últimos metros, para sumar un valioso y reconstituyente empate. Pero no fue así. Los de Ezequiel Loza no tuvieron su día y se agarraron a las intervenciones en la portería de Mediavilla y a la certeza de un par de jugadas puntuales para sumar tres puntos que le acercan al liderato del Sestao, que el jueves empató en Las Llanas con el Zamudio.
La primer parte mostró un buen San Pedro, que mandó sobre el terreno de juego, y un Portu apático y desnortado por completo. Solo chutó dos veces a gol. Un rebote, que cazó Galder, y el gol que lo marcó Artabe en un rechace tras una jugada de Arbeloa y una dejada de tacón de Bonilla. El San Pedro lo intentó pero negado en ataque. Se jugaba en terreno local y el Portu cedía mucho terreno. Los visitantes aprovechaban bien los espacios. Jagoba solo remató tímido ante Mediavilla. Y el portero se lució con un paradón ante Urko, el mejor de los visitantes.
En la segunda parte los locales mejoraron un poco. Otra vez Mediavilla respondió con una gran intervención a un disparo de Urko desde el vértice del área. De nuevo, Mediavilla se empleó a fondo a los pies de Bilbao. Hubo una reacción jarrillera, aunque duró diez minutos. Arbeloa y Bonilla no pudieron superar a Beldarrain y Erik. Galder lo intentó desde lejos y Bonilla no llegó a un pase de Arbeloa. El final fue de infarto. Olazabal puso un balón de oro que no pudo rematar ni Aitor Santos, ni Urko, en raya de gol. Y en la contra, en la prolongación, Arbeloa se inventó una vaselina logrando el segundo.