barcelona - El Barça celebró ayer el octavo doblete de su historia con un por las calles de la ciudad en un festejo que congregó, durante dos horas, a decenas de miles de aficionados culés, entregados a un equipo que ha sabido reponerse de su doloroso e inesperado tropiezo en los cuartos de final de la Champions, ganando Liga y Copa. Encima de un autobús descapotable de dos pisos, por una réplica de ambos trofeos, y escoltada por la Unidad Montada de la Guardia Urbana, la plantilla azulgrana partió del Puerto de Barcelona a las 18.15 horas. Piqué, como siempre, fue el gran animador de la fiesta. - G. Muñoz