Real Madrid2

Sporting1

REAL MADRID: Casilla; Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos (m.77, James), Modric; Bale (m.67, Lucas Vázquez), Cristiano Ronaldo y Benzema (m.67, Morata).

SPORTING PORTUGAL: Rui Patrício; Joao Pereira, Coates, Rúben Semedo, Zeegelaar; Martins (m.70, Markoivc), William Carvalho, Adrien Silva (m.73, Elías), Bruno César; Bryan Ruiz (m.90, Campbell) y Bas Dost.

Goles: 0-1: Min.47, Bruno César; 1-1: Min.89, Cristiano Ronaldo; 2-1: Min.93, Morata.

Árbitro: Paolo Tagliavento (Italia). Amonestó a Kroos por el Real Madrid; y a Adrien Silva, Carvalho y Zeegelaarpor el Sporting. Expulsó al técnico del Sporting Jorge Jesús.

Incidencias: Estadio Santiago Bernabéu, unos 77.000 espectadores.

madrid - Un tanto de falta de Cristiano Ronaldo a un minuto del final castigó al Sporting de su corazón, que tuvo en su mano el triunfo tras exhibir su potencial en el Santiago Bernabéu y desfigurar a un Real Madrid que acabó remontando con un testarazo de Morata que premió el orgullo.

Era un estreno trampa. El Sporting tiene más fútbol que nombre, llegaba sin hacer ruido al Santiago Bernabéu en su regreso a la élite del fútbol europeo y sorprendió a aquellos que esperaban una noche plácida de goleada. Bien plantado desde el inicio consiguió dejar sin identidad en el primer acto a un Real Madrid previsible. La presión portuguesa, el gusto por el balón y la buena ocupación de los espacios marcaron el duelo en su nacimiento.

Recuperaba Zidane la BBC 109 días después, con más de un integrante aún lejos de su mejor tono físico para un duelo de alta intensidad. Sin excusas por el cansancio y con el equipo fresco gracias a las rotaciones, el único argumento que provocó el enfado de la grada fue la falta de fútbol.

El justo premio para el Sporting llegaba nada más nacer el segundo acto. Se esperaba salida en tromba madridista y nada más lejos de la realidad. Una falta de entendimiento entre Ramos y Modric acabó con el balón en la zurda de Bruno César, que con un disparo ajustado al palo superaba la estirada de Casilla.

Bale no encontraba puerta en una buena falta en la frontal del área y junto a Benzema eran los elegidos para marcharse del campo. Lucas Vázquez y Morata entraban con tantas ganas que levantan a la afición. Ante la falta de fútbol bien estaba agarrarse al espíritu de lucha. Los cambios de Zidane surgían efecto.

Cristiano remató solo al palo, con todo para marcar de zurda. Pero no perdonó en el 89 cuando una falta la colocó en la escuadra. Así el Madrid evitaba la derrota. A la heroica llegó en la última jugada un gran centro de James, el remate de Morata y el gol de la victoria en el último segundo.