El Villarreal, obligado a remontar
El Mónaco vence 1-2 al conjunto castellonense y pone medio pie en la fase de grupos de la Liga de Campeones
Villarreal1
Mónaco2
VILLARREAL: Asenjo, Mario, Musacchio, N’Diaye, José Ángel, Bruno, Trigueros, Soriano, Castillejo; Pato, Santos Borré (MIn. 75, Mario González).
MÓNACO: Subasic, Raggi, Glik, Jemerson, Mendy, Bakayoko, Fabinho, Lemar, Bernardo Silva (Min. 80, Moutinho), Dirar, Germain (Min. 69, Carrillo).
Goles: 0-1: Min. 3; Fabinho, de penalti. 1-1: Min. 36; Pato. 1-2: Min. 72; Bernardo Silva.
Árbitro: Felix Brych (Alemania). Amonestó al local N’Diaye; y a los visitantes Lemar, Fabinho y Moutinho. Además, expulsó a Mendy, del Mónaco, por doble amarilla a los 86 minutos.
Incidencias: Partido de ida de la previa de Liga de Campeones, disputado en el Madrigal con 21.000 espectadores.
vila-real - Un Villarreal voluntarioso no pudo superar al Mónaco, que vio cómo con muy poco se llevaba una victoria que deja al conjunto español muy tocado y lejos de la Liga de Campeones. El partido estuvo marcado por un penalti que un desacertado N’Diaye regaló y que ya puso las cosas muy complicadas. A pesar de empatar gracias a un voluntarioso Pato, otro error en defensa propició el segundo tanto del Mónaco. El Villarreal lo intentó, pero le faltó físico y tranquilidad.
Así empezaba el partido tras una semana extraña y con muchos condicionantes negativos. Lesiones, salida del técnico Marcelino García Toral, sustituido por Fran Escribá, y muchos nervios, para afrontar un partido como esta previa. Se esperaba ver cómo acusaba el equipo esta circunstancia y cómo llegaba al partido tras tantas dudas. Y si faltaba alguna cosa, el penalti de N’Diaye a los dos minutos reabrió la polémica y dejó helado al Madrigal y tocados a los jugadores.
Tras el gol de Fabinho, los de Escribá empezaron a reaccionar, pero después de diez minutos malos y sin ideas, gracias a Pato, Soriano y las llegadas de José Ángel, el equipo encontró algo a lo que agarrarse. El atacante brasileño fue el más activo y estuvo cerca del gol hasta en dos ocasiones. Pero una vez Subasic y otra un disparo desviado, lo impidieron. Tras estas jugadas y con el Mónaco más exigido, parecía posible que la igualada llegaría. Y llegó a los treinta y seis minutos, cuando Pato cazó de cabeza un balón que el colombiano Santos Borré habilitaba, también con la testa. El empate dio tranquilidad y puso el partido otra vez en un guion más justo visto lo visto en la primera parte.
La segunda parte comenzó con un Villarreal más entonado y más activo, lo que le empezó a dar más confianza a la grada y a los futbolistas amarillos. Diez minutos que se saldaron con dos llegadas con peligro y algún centro con opciones. Pero el ritmo no era alto; el calor, el cansancio y las precauciones por no recibir gol, hicieron que el ritmo del partido fuera bajo.
Solo Pato parecía tener un punto más de chispa, como demostró a los dieciséis minutos con un buen disparo que se fue fuera por poco. El Villarreal siguió apretando hasta que llegó la jugada polémica del partido, cuando a falta de veinticinco minutos pidieron penalti por manos de Bakayoko dentro del área. Pero esta vez Felix Brych decidió no señalarlo, lo que aceleró el partido y la grada.
duro golpe Pero tras ese dominio, en la única jugada de peligro del Mónaco en la segunda parte, Bernardo Silva logró el segundo gol del Mónaco tras una buena contra conducida por él mismo. El tanto supuso un golpe duro para los locales, que vieron cómo un mínimo error les penalizó después de tanto esfuerzo. Un error que una vez más tuvo a un desacertado N’Diaye como protagonista, pues no acertó en su marcaje a Bernardo Silva.
Los últimos minutos tuvieron un marcado color amarillo, con un Villarreal buscando un gol que le metiera en la eliminatoria. Lo hicieron, además, con un hombre más tras la expulsión de Mendy en el minuto 86 después de que viera dos cartulinas amarillas consecutivas. Mario y Pato dispusieron de una ocasión cada uno para lograr el empate, pero no acertaron. Ahora, el Villarreal deberá remontar en Mónaco.